Foto: Nodo Conservation

• En el Día Mundial de la Vida Silvestre conversamos con una de las fundadoras de Nodo Conservation para conocer el trabajo que realizan a favor de la conservación de diversas especies. 

Desde su fundación, Nodo Conservation ha trabajado desde la ciencia, investigación y enfoque de género para promover la conservación de la vida silvestre y de los ecosistemas para un futuro sostenible, siempre de la mano de las comunidades. El trabajo de Nodo, por ejemplo, abarca el mapeo de amenazas del oso de anteojos y el tapir de montaña, análisis de la distribución potencial del jaguar en la Amazonía, monitoreo del paisaje sonoro, ecología de carreteras, entre otros. 

El equipo está conformado por cuatro mujeres. Vania Tejeda-Gómez, bióloga enfocada en la investigación utilizando ecología espacial; Pamela Pastor, geógrafa con experiencia en trabajo en comunidades nativas; Fabiola La Rosa, bióloga con experiencia en el desarrollo de monitoreo biológico en áreas protegidas; y Cristina López, bióloga especialista en el desarrollo de indicadores de biodiversidad en los bosques montanos y páramos.  

Actualidad Ambiental conversó con Vania Tejeda-Gómez para conocer el trabajo con las comunidades locales, los últimos resultados de las investigaciones y también los retos de ser mujer en un sector liderado mayoritariamente por varones. 

¿Cómo nace Nodo Conservation?

Teníamos la intención de causar impacto donde se necesita trabajar con la gente, donde a nivel de conservación tiene mucho potencial, pero la situación social es muy compleja y el rol de la mujer es un rol muy sumiso. Nodo nace con la meta de incidir en espacios donde no hay mucha atención del Estado o del ente privado pero existe potencial de investigación, conservación y donde las mujeres puedan involucrarse. Hacer investigación y luego no tener conciencia social te aleja del porqué haces conservación.

Mono machín de cabeza grande (Sapajus macrocephalus) con cría. Foto: Nodo Conservation y WWF

¿Cuáles son los problemas de coexistencia entre el oso de anteojos y el tapir de montaña, con los humanos?

Cuando llegamos a una localidad empezamos realizando encuestas para medir su capacidad de vulnerabilidad frente a la especie, sus miedos por ejemplo, les hacemos preguntas sobre qué les parecería un programa de educación ambiental y si estarían de acuerdo en participar en investigaciones. Muchas veces existe una percepción negativa con el oso de anteojos porque ataca al ganado por necesidades nutricionales, además existe una percepción mágica o mitos relacionada con las partes del oso. Con el tapir no hay muchos problemas de coexistencia, pero si exponemos sobre las enfermedades del tapir y el ganado vacuno.  

¿Cuáles fueron los resultados de la instalación de pasos de vías de fauna?

En concesiones forestales cuando se abren carreteras a veces es de forma indiscriminada, yo he visto cómo los monos araña y aulladores cruzaban la carretera exponiéndose a peligros por las maquinarias. Cuando el bosque queda partido por una carretera la fauna arbórea se acostumbra y ya no cruzan al otro lado. Esto puede limitarlos genéticamente y con el tiempo puede aislar a poblaciones pequeñas. Para crear los pasos de vías de fauna silvestre existen dos tipos: puentes naturales (amarrar como alianza entre árboles) y semiartificiales  (asociar lianas con algún tipo de material como cuerdas o sogas). Cuando hicimos la instalación y colocamos cámaras, los animales no cruzaban, solo se acercaban a morderlos. Pero luego de cuatro meses volvimos y vimos cruzar un kinkajú y tanto fue su agrado que empezó a  utilizarlo todos los días en los mismos horarios.

Oso de anteojos (Tremarctos ornatus). Foto: Nodo Conservation Y NCI

¿En qué consiste el proyecto del monitoreo del paisaje sonoro en la Amazonía sur?