En entrevista con Actualidad Ambiental, el Director Ejecutivo de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), Pedro Solano, consideró que los nuevos monitoreos que se realizarán en Espinar deben orientarse a determinar las causas de la contaminación en la zona e identificar a los responsables, de ser el caso. Agregó que se debe generar información nueva y confiable, que permita resolver este conflicto que ha desencadenado una ola de protestas en la zona desde el mes pasado.

El Minam señala que existen monitoreos ambientales en Espinar desde el 2003. Sin embargo, aún no se logra un consenso sobre la verdadera situación ambiental en la zona. ¿Por qué?
En este conflicto se han puesto de manifiesto diferencias de opinión y de visión sobre temas ambientales, sociales, ideológicos, políticos y económicos. Lamentablemente todos se abordan de manera simultánea y de esa forma resulta muy difícil resolverlos y pensar en soluciones a la vista. Existen diversos documentos técnicos que no son evaluados en esa dimensión, así como hay arreglos sociales que se cuestionan desde otra esfera. En cuanto a lo ambiental, considero que es fundamental separar este tema de los demás para generar información nueva y confiable que permita luego avanzar con el resto de la agenda.

¿Considera que los reclamos son solamente políticos o hay en efecto un problema ambiental a considerar?
El tema ambiental en Espinar ha sido invocado por pobladores y autoridades locales y, pese a que existen diversos monitoreos y documentos previos, estos no son consistentes entre sí y por lo tanto no han generado credibilidad hasta el momento por los distintos grupos de interés. Varios de estos documentos hablan de índices de contaminación. Entonces resulta muy importante la realización de nuevos muestreos y monitoreo de una manera participativa para identificar las zonas posiblemente contaminadas, los niveles de contaminación, las causas, los probables responsables y las medidas para enfrentar el problema.

El fin de semana el Ejecutivo lanzó el Plan Integrado de Intervención Sanitaria y Ambiental para la Provincia de Espinar. ¿Qué tan importante es este plan para resolver este conflicto?
Este Plan es una muy buena oportunidad para obtener, consolidar y presentar información técnica de calidad. Para ello, sin embargo, se requiere que se incorpore formalmente la participación de los actores locales en el proceso, y no sólo de las autoridades responsables por parte del gobierno. Esto será fundamental para validar la calidad de los resultados y que el diálogo se retome. Los anuncios del gobierno central en este sentido, son muy positivos.

¿Y si se determina que la contaminación es responsabilidad de Xstrata?
La evaluación no debe reducirse a las actividades de Xstrata sino a la calidad del ambiente en toda esa zona y a tomar medidas para enfrentar las diferentes causas de contaminación que se identifiquen. Si existe una causalidad entre la contaminación y las operaciones de la empresa, corresponderá a nuestras autoridades evaluar si ha existido un incumplimiento de obligaciones y sancionar. En caso de no existir incumplimientos contractuales, y las razones siguen siendo atribuibles a la empresa se deberían definir nuevas condiciones de operación para reducir estos niveles de contaminación. La Ley no es lo único importante en esto, hay un tema de salud y ético que también debe considerarse.

Aparte de la contaminación, este conflicto también se generó porque los pobladores querían que se incremente del 3 a 30% los aportes que la empresa otorgaba voluntariamente a la zona de influencia. ¿Cómo resolver este otro problema?
Los temas sociales son también de altísima prioridad, donde la participación de las poblaciones en los beneficios que genera la empresa siempre puede ser materia de diálogo y revisión, pero estos nuevos acuerdos requieren de un escenario donde la salud y el medio ambiente estén garantizados; por lo que deberían abordarse luego que las dudas sobre los impactos ambientales estén suficientemente aclarados e informados.

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Foto: El Comercio