Imagen: Difusión

A inicios de febrero de este año, diversas imágenes alertaron sobre una inusual coloración rojiza del río Rímac, la fuente de agua de millones de personas. Esto llamó la atención general, y entidades como la Autoridad Nacional del Agua (ANA) y el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) anunciaron investigaciones para determinar el origen de la contaminación.

Ante el hecho, la empresa Sedapal, encargada del abastecimiento de agua potable y saneamiento en Lima, señaló que esta coloración se dio aguas debajo de donde realizan la captación para abastecer de agua a los hogares y deslindó cualquier responsabilidad. Sin embargo, Latina Noticias accedió a documentos del ANA y el OEFA, los cuales confirmarían que el propio Sedapal vertió aguas contaminadas a través de su colector Cerro Candela. Dichos residuos se habrían descargado desde octubre del año pasado y contenían elementos como cromo, plomo, manganeso, aceites, grasas y coliformes.

Extracto del informe de OEFA

Según los informes de la ANA, la concentración de coliformes superó en 24 millones % los valores permitidos, mientras que OEFA detectó metales peligrosos que ponen en riesgo la salud pública. Entre ellos, el manganeso, que puede acumularse en el sistema nervioso y estar asociado a enfermedades graves.

Al respecto, la Defensoría del Pueblo anunció que reunirá a las principales autoridades sanitarias y ambientales para coordinar acciones conjuntas, y solicitará el inicio de investigaciones penales debido a la gravedad del caso.

Sedapal niega responsabilidad

Tras la denuncia de Latina Noticias y el pronunciamiento de la Defensoría del Pueblo, Sedapal publicó un comunicado donde admitió que los vertimientos provenían de su colector Candela, pero agregó que las aguas contaminadas tenían su origen en los desechos de una empresa textil, la cual habría sido denunciada penalmente.

“A inicios de febrero del presente año, las aguas del río Rímac presentaron una coloración rojiza que sorprendió a todos los ciudadanos. Ante este hecho, Sedapal, en coordinación con la Policía y el Ministerio Público, realizaron investigaciones para determinar las causas del suceso, detectando que una empresa textil habría sido la causante al verter sustancias desconocidas a través del colector Candela”, indica el comunicado.

La empresa también informó que procedió a cerrar las redes de la empresa implicada y la denunció por delitos ambientales. Asimismo, recalcó que “en ningún momento se vio afectado el sistema de tratamiento de agua de Sedapal, por lo que el servicio se continuó brindando sin interrupciones y con los estándares óptimos de calidad de siempre”.

Finalmente, Sedapal afirmó que un equipo de especialistas está “monitoreando los residuos vertidos en el colector Candela, garantizando así el cumplimiento de los procesos legales y ambientales en favor de todos nuestros usuarios”.