- Investigación de Epicentro.Tv presenta videos y audios inéditos en torno al derrame de petróleo que contaminó el mar peruano.
- Según pericia hecha en Argentina y EE. UU., hubo “defectos en la fabricación del PLEM”, el objeto que sirve de unión entre las mangueras del buque y el ducto de la refinería.
Hace exactamente un año ocurrió el peor desastre ambiental en el mar peruano. Se derramaron cerca de 12 mil barriles de petróleo de una estación de la Refinería La Pampilla, operada por Repsol. El hecho se produjo durante las operaciones de descarga del Buque Tanque Mare Doricum, en las instalaciones del Terminal Multiboyas N° 2 de la refinería ubicada en Ventanilla.
Al principio, la empresa intentó minimizar el daño, incluso un representante afirmó que se trataba de menos de un barril, pero horas después el Ministerio del Ambiente (Minam) anunció que se trataba de al menos 11 900 barriles. Además, el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) señaló que el área afectada por el derrame de petróleo era de 1 800 490 metros cuadrados de suelo y 7 139 571 m2 de mar.
Hasta la fecha, no existe información completa respecto al daño real producido a las playas, a las aguas del mar y los recursos hidrobiológicos, advirtió hace poco la Defensoría. Tampoco se conocen los avances de la investigación que inició el Ministerio Público sobre este caso. Sin embargo, un reportaje de Epicentro.Tv presentó en exclusiva algunos datos que aún eran desconocidos por la opinión pública.
Una de las revelaciones del reportaje, elaborado con la colaboración de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), es el resultado de una pericia realizada al PLEM, el objeto que unía a las mangueras del Buque Tanque Mare Doricum y el ducto de la refinería. Según este estudio, este dispositivo se rompió por el “excesivo desplazamiento de la conexión del buque-tanque respecto al PLEM”, y porque había “defectos en la fabricación del PLEM”.
El reportaje también descarta que el accidente se haya producido por las olas provocadas por la erupción del volcán Tonga, como lo había afirmado en su momento la empresa española. “Ninguna autoridad reportó alerta alguna. El mar peruano estuvo calmado aquel día. Aun hoy, a Repsol le cuesta desprenderse de esa tesis”, señala Epicentro.Tv.
La investigación también presenta videos y audios inéditos en torno a este desastre ambiental. Por ejemplo, se puede observar el momento en que los buzos se sumergen para hallar el origen del derrame y notan que el petróleo sigue escapando del ducto, aún seis días después del 15 de enero de 2022.
El reportaje también incluye las declaraciones de la empresa. Luis Vásquez, vocero de Repsol, señala que “lo que se derramó ya se limpió. Ya está limpio tanto por las acciones de limpieza como por las acciones propias de la naturaleza, evaporación y demás. Y eso no solamente lo demuestran todos los informes técnicos que hemos emitido, y que los hemos compartido con la autoridad, de hecho, hemos emitido uno nuevo en octubre, donde tanto el mar como el subsuelo marino y las playas están libres de hidrocarburo”.
Además de representantes del Congreso, OEFA y los pescadores afectados, el reportaje también incluye la versión de la Procuraduría Pública del Minam, cuyo titular, Julio Guzmán, afirma que el problema en este caso siempre fue el PLEM, tal como lo habían señalado desde el principio.
“Los daños se tienen que medir desde dos aspectos: daños y reparación en términos ambientales, que puede ser la exigencia de los planes de rehabilitación; y los daños y exigencias en términos económicos. Es decir, hay cosas que no se van a poder rehabilitar y que tienen que ser sancionadas desde el punto de vista económico, hay que cuantificarlas para saber cuánto es lo que la empresa terminará pagando al Estado peruano”, señaló el procurador.
Comments are closed here.