La Comisión de Agricultura del Congreso de la República suspendió la primera audiencia del proceso de consulta de la Ley de Flora y Fauna Silvestre (4141-2009) que se realizó en Madre de Dios. Esta medida se dio luego de que las comunidades nativas y sectores agrarios de Madre de Dios, representados por la Federación Nativa del río Madre de Dios y Afluentes (FENAMAD), decidieron retirarse intempestivamente durante la primera audiencia regional convocada por el Legislativo.

Según FENAMAD, las condiciones de la audiencia no fueron favorables para los indígenas porque el Congreso no tuvo buenas coordinaciones. Además, aseguraron que “los asistentes manifestaron su disconformidad porque tanto con los materiales proporcionados por los organizadores, como las estructura y facilitación del evento, las cuales fueron excesivamente técnicas”.

Sin embargo, fuentes de Actualidad Ambiental que asistieron a la reunión afirmaron que antes de la cancelación de la primera audiencia pública, los representantes de la Comisión Agraria, Luis Cruz y Ofelia Rojas, expusieron sobre los temas ligados al proceso y metodología de las audiencias. Es decir, no se llegó a exponer los temas técnicos referentes a la misma ley.

Luego de la cancelación, los representantes de la Comisión Agraria brindaron una conferencia de prensa donde señalaron que FENAMAD canceló la audiencia porque solicitaban primero la aprobación de la Ley Marco de Consulta Previa. Asimismo, indicaron que los líderes indígenas expresaron su deseo de discutir la nueva Ley Forestal con el próximo gobierno.

Por otro lado, el Gobierno Regional de Madre de Dios expresó públicamente que “apoyan, respaldan y se aúnan a la decisión de la organización indígena FENAMAD” porque rechazan “las imposiciones centralistas del gobierno central”.

Días antes de la primera reunión, FENAMAD ya había expresado su malestar para no participar en las audiencias programadas, publicando un pronunciamiento donde solicitaban más tiempo para que los pobladores puedan informarse más sobre el proyecto de ley y para “tener una coherente metodología para un proceso vinculante que no sea cuestionado posteriormente”.

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Foto: FENAMAD