Cerca de cinco mil personas llegaron hasta el Centro de Lima para manifestarse en contra de los sucesos violentos ocurridos en Bagua, donde fallecieron 32 personas, y la actitud con la que el gobierno viene afrontando la crisis generada tras estos enfrentamientos.

La movilización, donde participaron desde alumnos universitarios, pensionistas, grupos religiosos a organizaciones culturales y políticas, tuvo su preconcentración alrededor de las dos de la tarde en la plaza ‘2 de mayo’.

Siempre de forma pacífica, y acompañados por oficiales de la Policía Nacional, los manifestantes se movilizaron en dirección a la avenida Nicolás de Piérola. Promediaba las 3 de la tarde.

Bajo consignas como “La selva no se vende, la selva se defiende” o “Los policías también son nuestros hermanos”, la marcha continuó su recorrido cruzando la plaza San Martín, y prosiguió por la avenida Abancay en dirección al edificio del Congreso de la República, espacio considerado (al igual que Palacio de Gobierno) como zona rígida para manifestaciones.

Es en el intento de algunos protestantes (sobre todo algunos ligados al Partido Nacionalista y a la Confederación General de Trabajadores Peruanos, CGTP) por romper la barrera policial impuesta en las cercanías del Congreso, que la Policía Nacional decide replegar a los manifestantes mediante el uso de gases lacrimógenos.

La manifestación terminó cerca de las 5:30 de la tarde, con actos culturales y declaraciones diversas, en la plaza San Martín.