Gabriel Quijandría fue ministro del Ambiente desde noviembre de 2020 a julio de 2021. Foto: Minam
- Para el extitular del Minam, los temas centrales en materia ambiental del nuevo Gobierno deben girar en torno a residuos sólidos, cambio climático, minería ilegal, uso sostenible y restauración de ecosistemas, y justicia ambiental.
Por Jaime Tranca / jtranca@spda.org.pe
Tras la elección de Pedro Castillo como presidente y la designación de Rubén Ramírez Mateo como nuevo ministro del Ambiente, ¿qué temas centrales debe priorizar este Gobierno? ¿Qué líneas de trabajo de la anterior gestión deben continuar? ¿Cuáles son los temas pendientes en asuntos ambientales?
Para responder a estas preguntas, conversamos con el extitular del Ministerio del Ambiente (Minam), Gabriel Quijandría, quien asumió dicho cargo durante los ocho meses que duró el Gobierno de Transición y de Emergencia liderado por Francisco Sagasti.
Cabe recordar que Quijandría Acosta, sociólogo de 52, años también fue viceministro de Desarrollo Estratégico de Recursos Naturales del Minam durante el Gobierno de Ollanta Humala y Martín Vizcarra. Asimismo, después de su salida del Minam en julio pasado, fue designado director regional de Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza para América del Sur (UICN Sur).
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Nuevas caras, el mismo rumbo
Según Gabriel Quijandría, el sector Ambiente ha destacado por mantener una línea de trabajo progresiva a través de las diversas gestiones y “creo que independientemente de a quién pongan, lo importante es que la persona a cargo del sector decida por apostar por la continuidad de determinados temas y dejarse llevar por la experiencia del sólido equipo técnico que tiene el Minam. Hay una estructura con la cual trabajar y lo que se requiere es una persona que tenga la visión de liderazgo para conducir ese equipo”.
Por ello, el exministro recomendó a su sucesor tener una interacción con el equipo técnico para conocer el detalle de los avances y temas pendientes y, en función de ello, definir su propia agenda.
“El Minam ha desarrollado distintos temas que han estado presentes desde antes de la creación del ministerio, desde el CONAM (Consejo Nacional del Ambiente). Estos temas son de largo aliento, no se resuelven simplemente en una administración de Gobierno, no se resuelven en cinco años, sino requieren trabajo constante”, resaltó.
Los temas prioritarios
Para Gabriel Quijandría, la gestión ambiental del nuevo Gobierno debe priorizar cinco temas centrales que ya están encaminados: residuos sólidos, cambio climático, lucha contra la minería ilegal, uso sostenible y restauración de ecosistemas, y la justicia ambiental.
En el caso de la gestión de residuos sólidos, “hay que trabajar en el tema de infraestructura, los rellenos sanitarios, pero también en el desarrollo de capacidades y la segregación en la fuente que se ha trabajado con los municipios”.
En cuanto al cambio climático “tenemos la reducción de emisiones, la reducción de vulnerabilidad y la adaptación. Además, se ha podido dejar aprobado el Plan Nacional de Adaptación que debería ser la hoja de ruta para llevar adelante todo este proceso”.
“Se ha dejado también todo este trabajo avanzado en la determinación de los beneficios de la apuesta por la carbono neutralidad, y hay un trabajo que se ha hecho con el BID (Banco Interamericano de Desarrollo) que demuestra que apostar por la carbono neutralidad al 2050 generaría 140 mil millones de dólares y eso requiere un trabajo muy cercano con los sectores productivos: Energía y Minas, Produce, Agricultura y MEF. Con el sector privado también”, agregó.
Foto: FEMA
Respecto a la lucha contra la minería ilegal, el exministro consideró que la reciente aprobación del Plan Restauración le da continuidad a la Operación Mercurio, una iniciativa del Ejecutivo que pretendía reducir esta actividad extractiva en zonas sensibles de la Amazonía sur del Perú, especialmente la Reserva Nacional Tambopata de Madre de Dios.
En mencionado plan, según Quijandría Acosta, puede ser una nueva oportunidad para plantear una lucha integral con a la minería ilegal. Es decir, no solo se debe apostar por erradicar esta actividad en zonas no permitidas, sino también generar incentivos para otras actividades productivas alternativas que beneficien a la población de Madre de Dios, Cusco y Puno.
Como cuarto tema central se encuentra el uso sostenible y restauración de ecosistemas. Para Quijandría, este tema es nuevo pero no menos importante, ya que involucra el trabajo conjunto con poblaciones emprendedoras y empresas que apuestan por los productos sostenibles y la conservación. Como ejemplos mencionó el aprovechamiento de aguaje y aguaymanto que se realiza en áreas protegidas como la Reserva Nacional Pacaya Samiria (Loreto) y el Parque Nacional del Manu (Cusco y Madre de Dios), respectivamente.
“Esa debería ser una línea muy importante en términos de la lógica que está llevando el nuevo Gobierno, la lógica de integración de comunidades y de la población local en la economía nacional”, resaltó Quijandría.
Finalmente, el exministro mencionó como quinto tema central a la justicia ambiental, incluyendo principalmente la seguridad de los defensores ambientales que en los últimos meses han sufrido diversos atentados. Solo en el último año, ocho defensores fueron asesinados.
Quijandría destacó la creación de la Comisión Multisectorial para la Prevención y Reducción de Delitos Ambientales (liderado por el Minam) o el Protocolo para la protección de defensores de derechos humanos, que tienen como fin mejorar la velocidad de respuesta de las diferentes entidades del Ejecutivo ante las amenazas que sufren muchos peruanos que defienden sus territorios y la biodiversidad del país. Asimismo, consideró que es necesario incluir en estos esfuerzos al Ministerio Público y Poder Judicial de manera más cercana.
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Foto: Vico Méndez / SPDA
TEMAS PENDIENTES
Acuerdo de Escazú
Entre los temas pendientes relacionados a temas ambientales, el ahora director regional de UICN Sur mencionó al Acuerdo de Escazú, cuya ratificación fue rechazada por el anterior Congreso de la República.
Según Quijandría, durante su gestión no tenía mucho sentido volver a intentar que se ratifique este tratado con el mismo Congreso que lo rechazó. “Ahora, con el nuevo Legislativo y el nuevo Ejecutivo, hay una oportunidad de hacer un nuevo intento. Es importante que el canciller en su discurso al asumir el cargo haya mencionado explícitamente el Acuerdo de Escazú como uno de los temas que el Ministerio de Relaciones Exteriores pretende impulsar” destacó.
Asimismo, dijo que esta vez espera “un debate con certezas y no como el anterior que estuvo plagado de mentiras que beneficiaban a los que no quieren que haya apertura en la información ambiental o que las personas puedan participar en las decisiones de la temática ambiental. Los argumentos estaban plagados de tonterías como ‘el acuerdo iba a afectar la soberanía’. Eso no tenía pies ni cabeza”.
Foto: Diego Pérez / SPDA
Ordenamiento territorial
Para el exministro, otro tema pendiente es el ordenamiento territorial. “Yo creo que sería interesante poder plantear una discusión sobre cómo queremos llevar adelante el desarrollo futuro a nivel nacional”, señaló. Asimismo, agregó que es necesario tomar en cuenta “los estándares que tienen que utilizarse en determinadas intervenciones dentro del territorio para que no afecten los ecosistemas o de los servicios ecosistémicos que estos espacios proveen en el largo plazo. Esto permitirá asegurar el bienestar, generar movimiento económico y cerrar brechas de bienestar”.
Para ello, consideró, se debe poner al Minam como líder de este tema. “No se trata de que al Minam solo le interesa el ambiente y el tema de ordenamiento territorial debe estar en otro sector, no. Yo creo que el Minam está en una posición absolutamente ventajosa para ser el que conduzca este proceso porque precisamente al no ser un sector que otorga permisos o que tiene un interés particular en alguna actividad productiva, tiene la capacidad de tener una neutralidad respecto al uso del territorio”, explicó.
“Se trata de armonizar todos los ordenamientos que priorizan los sectores como Energía y Minas, Agricultura o Producción, porque si no pasará lo de ahora: tenemos un montón de ordenamientos con lógicas distintas que no conversan entre ellos, y que no recogen el sustrato ambiental. […] Yo creo que el Minam tendría que conducir ese proceso y creo que debemos dirigirnos a la discusión de una Ley de Ordenamiento Territorial que deje esto ya plenamente establecido”, agregó.
Foto: Jaime Tranca / SPDA
Gestión de recursos en áreas naturales protegidas (ANP)
Gabriel Quijandría también manifestó que el nuevo Gobierno debería plantear una discusión sobre el tema de la gestión de recursos naturales dentro de las áreas protegidas. Según el exministro, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) debe ser el ente rector de todos los recursos que se encuentran dentro de las ANP.
“En estos momentos, por ejemplo, el Sernanp es la autoridad forestal y de fauna silvestre dentro de las ANP pero no lo es de los recursos hídricos ni de los recursos hidrobiológicos porque las autoridades a cargo de estos se han negado a que el Sernanp asuma esa responsabilidad. […] Yo creo que eso debería subsanarse y que el Sernanp debería tener dominio y responsabilidad completa sobre todos los recursos naturales que están en áreas protegidas. Esa es una discusión que hay que plantear de manera seria”, recalcó.
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Foto: Diego Pérez / SPDA
Gestión de bosques al Minam
La gestión de bosques es otro tema pendiente. Para Quijandría, el encargado de la gestión forestal debería ser el Minam. “Yo creo que deberíamos cambiar hacia un esquema similar al que tienen en Colombia o Costa Rica, donde todo el bosque está bajo la autoridad del Ministerio del Ambiente. Eso no quiere decir que vayas a dedicar a todo el bosque a conservación estricta o preservación intangible, sino que pueda darse una lógica completa de paisaje a la gestión del ecosistema forestal”, explicó.
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Foto: Jaime Tranca / SPDA
Ambiente y salud
Quijandría manifestó que el nuevo Gobierno debe impulsar la atención de personas afectadas por impactos ambientales, ya sean causados por el hombre o la naturaleza. En este caso mencionó a los afectados por la contaminación por metales pesados en Espinar, Cerro de Pasco, La Oroya y casos similares.
“Creo que ahí hay un tema muy importante que se debe impulsar junto con el Ministerio de Salud y otros sectores. En algunos casos estamos hablando de grupos no tan pequeños que fueron afectados como consecuencia de actividades extractivas no suficientemente bien manejadas, pero también por efectos del cambio climático. Es importante que el ministro del Ambiente sea oroyino y que pueda en su gestión poner en un sitio principal el tema de la salud ambiental y la calidad ambiental. Mi recomendación iría por apostarle fuerte al posicionamiento de ese tema como el característico de la administración actual. Es importante aprovechar que tengamos por primera vez a un ministro proveniente de una zona afectada para que pueda dar fe del problema que genera la insuficiente atención del tema ambiental y de los problemas en salud que esto genera”, subrayó.
Foto: Yuri Hooker
Mar Tropical de Grau
Finalmente, el exministro se refirió a la creación de la Reserva Nacional Mar Tropical de Grau, que ya espera una década para su establecimiento. Como se recuerda, esta propuesta de área protegida conservaría una zona del mar peruano (entre Tumbes y Piura), caracterizada por resguardar una importante muestra de recursos hidrobiológicos.
Pese a que durante su gestión se lograron establecer 7 millones de hectáreas nuevas como áreas protegidas, entre la Reserva Nacional Dorsal de Nasca y 6 áreas de conservación regional, Mar Tropical de Grau aún es percibida como una gran deuda.
“Yo creo que debemos aprovechar el nuevo escenario, un escenario marcado por los resultados de la evaluación de la prospección sísmica que se hizo en marzo de 2020. Después de años de estar dando vueltas con que ‘ya viene el barco’ para demostrar el ‘camisea submarino’ en esa zona, finalmente no se encontró nada. Eso no se ha podido difundir mucho porque inmediatamente explotó la pandemia y nos llevó a otro tema. Hay que poner sobre la mesa este nuevo escenario y decir que ya sabemos que no hay un ‘camisea submarino’, entonces ¿ya me das permiso para poner mi área protegida después de diez años de habérmela aguantado?”, señaló.
Gabriel Quijandría afirmó que el establecimiento de esta nueva área protegida también dependerá del nuevo ministro, de su capacidad de incidencia y su modo de trabajo con los demás sectores.
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