El caserío Panguana I Zona pide que la empresa Cacao del Perú Norte S.A.C., ahora denominada Tamshi S.A.C., cumpla con la promesa de cederles el espacio que utilizaban como terreno, el cual desde hace 80 años sirve como cementerio de la comunidad de Panguana. Actualidad Ambiental conversó con la teniente gobernadora, Ruth Zumba Loja; y Ana Rosa Mendoza, agente municipal de Panguana I Zona, quienes afirman que la empresa les ofreció donar 2 hectáreas como solución, pero a la fecha no hay un documento que acredite ese trámite.
Para Ana Rosa Mendoza Veintemilla, agente municipal de Panguana I Zona, el problema se originó cuando la empresa Cacao del Perú Norte S.A.C. se instaló en el lugar y se comprometió a donarles el terreno de 2 hectáreas –donde se ubica el cementerio–. Sin embargo, Mendoza afirma que a la fecha no hay ningún trámite del documento iniciado por la empresa. “De repente en un tiempo van a venir otros diciendo que es suyo, como lo hicieron ellos con el cacao. En ese momento nos dieron un plazo de 7 días para sacar a nuestros muertos. Somos 3 comunidades y muchos se han ido a enterrar a otro lugar, pero nosotros nos mantenemos. Hace casi 80 años es nuestro cementerio y no nos van a sacar”, asegura Mendoza Veintemilla.
De acuerdo a la dirigente, la empresa argumentó que tienen problemas con la titulación porque son varios los herederos del terreno que da al cementerio. “La empresa nos ha dicho que el terreno que compraron es de la familia Vásquez García, dice que son varios herederos. Nos han dicho que hay que tener paciencia. Pero nosotros hemos solicitado que investiguen si hay un proceso de titulación y no hay nada. Nos están mintiendo. Supongamos que hay represalias con nosotros, ¿a dónde vamos a acudir? Queremos nuestros documentos que aseguren que ese terreno es de nosotros”, señaló la teniente gobernadora Ruth Zumba Loja.
Aseguran que, debido a este problema de tierras, los comuneros no pueden circular por la vía vecinal que cruza el cementerio. “No nos dejan pasar desde el pase del puerto hacia el cementerio. (…) De la orilla serán unos 100 a 150 metros desde el cementerio donde nos dijeron que también podemos ir para hacer nuestro puerto y les hemos dicho que no podemos ir más allá, pero los representantes del cacao nos dicen que esta es su tierra, que es propiedad privada”, detalla Mendoza Veintemilla.
“Yo soy autoridad, bienvenido sea el que quiera trabajar, pero que cumpla lo que promete. Estamos buscando armonía, pero no nos dan cara. Nosotros queremos conversar, pero (parece que ellos) no. Nos están mintiendo. Que haga cumplir lo que pide el Poder Judicial. Ellos son los que tienen que ver que se cumpla”, concluyó.
Fotos: Diego Pérez / Oxfam.
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