La destrucción de ecosistemas, impactos en cambio climático por emisiones de GEI y contaminación de agua dulce figuran entre los impactos más graves señalados un estudio preparado por la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA) sobre los impactos de las grandes represas en América Latina.
En el estudio ‘Grandes Represas en América, ¿Peor el remedio que la enfermedad?’ se señalan otros impactos negativos como la disminución de la biodiversidad, incluyendo especies de peces migratorios y el aumento de riesgos sísmicos.
En el informe se señala que estos daños se derivan, entre otros, de la falta de estudios de impacto ambiental integrales; la ignorancia de los estándares internacionales aplicables; y la falta de análisis comprehensivo de alternativas.
Además, la nota de prensa agrega: “Las comunidades afectadas, en su mayoría pueblos indígenas, tribales y campesinos, denuncian la falta de consentimiento previo, libre e informado, ser objeto de presiones y hostigamientos cuando se oponen a los proyectos, y no contar con información clara e integral de éstos, ni de medidas de prevención o compensación por los daños”.
CASO SERÁ ATENDIDO POR LA CIDH
El próximo 2 de noviembre de 2009 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos celebrará (en Washington, Estados Unidos) una audiencia pública para abordar el impacto que las grandes represas en América Latina tienen en los derechos humanos y en el ambiente.
En la audiencia, solicitada por más de cuarenta organizaciones ambientalistas nacionales e internacionales y de comunidades afectadas, se presentarán las conclusiones del informe “Grandes Represas en América, ¿Peor el remedio que la enfermedad?” preparado por AIDA en coordinación con varias organizaciones.
Se informará a la Comisión de la situación, para que la investigue y recomiende la observancia de los estándares internacionales, y así evitar mayores daños ambientales y a los derechos humanos. La información será presentada por Gabriel Espinoza, representante de las comunidades afectadas por la represa El Zapotillo, en México, Rafael González y Astrid Puentes, de AIDA, y Shannon Lawrence de International Rivers.
Astrid Puentes, co-Directora de AIDA, “la convocatoria de la audiencia es una demostración muy positiva de la CIDH de reconocer que el desarrollo de grandes represas podría estar afectando los derechos humanos”.
“Esperamos que la Comisión dé seguimiento e investigue la situación y formule recomendaciones a los Estados, para que se adecuen a los estándares internacionales, atiendan las obligaciones de derechos humanos y eviten graves impactos ambientales”, detalló.
“Aceptamos que las necesidades de energía y agua y se deben solucionar como un derecho fundamental de las personas” dijo Pbto. Gabriel Espinoza, vocero de las comunidades afectadas de El Zapotillo, que se pretende construir en la región de Los Altos de Jalisco, México, “Pero no aceptamos la forma en que las autoridades lo quieren hacer porque atentan contra nuestra libertad, contra la vida, la historia, la cultura, la economía, el arraigo”, añadió.
Por su parte, Monti Aguirre, de International Rivers, indicó: “Generalmente hay mejores alternativas, más baratas y menos destructivas que la construcción de grandes represas, tanto para atender la demanda de agua como de energía, y para reducir los impactos de inundaciones”.
“Cuando se discuten proyectos de grandes represas, soluciones como el abastecimiento de agua descentralizado y en pequeña escala, nuevas opciones renovables, y opciones de eficiencia y conservación a gran escala muchas veces son ignoradas o no tenidos en cuenta. Como lo recomendó la Comisión Mundial de Represas, debería priorizarse el uso de procesos integrales y participativos para evaluar de antemano las necesidades de agua y energía, seguidos por procesos participativos similares para evaluar la gama de opciones para atender esas necesidades”.
6 comentarios · Dejar un comentario
GRANDES REPRESAS : RECHAZADAS POR LOS APUS
Guiados por la pluma de Roger Rumrrill … enteremosnos de SI LOS APUS QUIEREN O NO QUIEREN LAS GRANDES REPRESAS
Paquitzapango o la casa del águila
Uno de los mitos más vivos en la memoria del pueblo Asháninka es el de Paquitzapango o la casa del águila amazónica. Narra la historia de Paquitza, el águila que construyó su guarida en los inaccesibles muros del cañón del río Ene. Desde su pétrea atalaya el águila vigilaba a los balseros Asháninka que se aventuraban por el cañón y que siempre, ineluctablemente, terminaban como alimento del voraz Paquitza.
Antes de ser exterminados por Paquitza, los Asháninka le tendieron una trampa: esculpieron con barro y látex de shiringa la imagen de su Apu y le colocaron en una balsa y con él como pasajero bajaron por el Ene. Paquitza voló raudamente a capturar a su presa, pero sus poderosas garras quedaron fuertemente adheridas y pegadas a la mezcla de caucho y barro.
Paquitza ha vuelto al río Ene. Esta vez tiene el nombre de Central Hidroeléctrica Paquitzapango y es uno de los seis megaproyectos que los presidentes Alan García y Lula da Silva suscribieron el 28 de abril pasado para la integración energética entre el Perú y Brasil.
Para Ruth Buendía Mestoquiari, la presidenta de la Central Asháninka del Río Ene, los indígenas son convidados de piedra de este proyecto: nadie les ha consultado nada. Sin embargo, el proyecto implica la construcción de tres represas de 165 metros de altura que deben provocar la inundación de 40 mil hectáreas de bosques y el traslado forzado de decenas de comunidades.
Cuando Roger Rumrrill viajó hace poco por la selva central escuchó que los Apus están tramando cómo cortar las garras y las alas del nuevo Paquitza que amenaza sus vidas: LA MONSTRUOSA REPRESA DE PAQUITZAPANGO
NO A LA MEGA-REPRESA DE PAQUITZAPANGO
NO A LA MEGA-REPRESA DE INAMBARI
GRANDES REPRESAS TRAEN PERJUICIOS EN EL PERÚ
COMO YA ESTA CLARAMENTE DEMOSTRADO, LA FIEBRE DE CONSTRUCCION DE REPRESAS, AMENAZA CON VOLVERSE UNA PANDEMIA EN EL PERÚ … Y CONTRIBUIRÁ AL RECALENTAMIENTO GLOBAL …que precisamente la CONFERENCIA DE COPENHAGE busca detener …
He aquí un ejemplo cercano de la consecuencias de las represas “hechas por hacer” … esta vez en Junín
LA REPRESA DE UPAMAYO ES UNA PESADILLA PARA LOS COMUNEROS DE JUNÍN
Comuneros afectados por represa Upamayo inician diálogo con el gobierno
Conacami.- Pobladores de la Comunidad Campesina de San Pedro de Pari, ubicada en el distrito de Ondores, provincia de Junín, acordaron, con representantes del gobierno central, la instalación de una mesa de diálogo en la Presidencia del Consejo de Ministros en septiembre del 2008.
Roberto Tacuri, presidente de la Coordinadora Regional de Comunidades Afectadas por la Minería de Junín (CORECAMI JUNIN ), señaló que el acta suscrita establece la mesa de diálogo con las autoridades del Ejecutivo En la cita estarán presentes, además de los representantes del gobierno y de las comunidades, funcionarios de las empresas energéticas y de las empresas mineras que operan en la zona, entre ellos Volcan, Brocal, entre otras.
Como se sabe, los comuneros de San Pedro de Pari tomaron las instalaciones de la represa de Upamayo, demandando una indemnización por los daños causados en 3750 hectáreas de pastizales y campos de cultivos, producto de los desbordes de las aguas de la represa.
Durante décadas los comuneros de Pari han sufrido los efectos de la inundación de sus campos de pastoreo con aguas contaminadas provenientes del Lago Chinchaycocha, que ha sido afectado por el arrojo de aguas contaminadas por parte de diversas empresas mineras que operan cerca a los ríos afluentes del Chinchaycocha.
Además, exigen la puesta en marcha de un plan de descontaminación del Chinchaycocha y la ejecución de programas de desarrollo sostenible en la zona.
A la protesta inicial de los pobladores de San Pedro de Pari se sumaron los pobladores de Ondores, Vico y Villa Junín y otras ubicadas en los alrededores del lago.
LA REPRESA DE UPAMAYO ES UNA PESADILLA PARA LOS COMUNEROS DE JUNÍN
NO A LA “FIEBRE DE CONSTRUCCION DE REPRESAS”
ALENTEMOS PROYECTOS DESCENTRALIZADOS DE ENERGÍA LIMPIA
NO A LAS MEGA-REPRESAS
NO A LA MEGA REPRESA DE PAQUITZAPANGO
NO A LA MEGA REPRESA DEL RÍO INAMBARI
NO A LAS 17 MEGA REPRESAS ACORDADAS “BAJO LA MESA” POR LULA DA SILVA Y ALAN GARCÍA
NO A LOS GRANDES NEGOCIADOS DEL AGUA Y LA ENERGÍA DEL GIGANTE BRASILEIRO
Día Mundial de Acción contra las Represas, por los Ríos, el Agua y la Vida.
En el Calendario Ambiental se ha establecido el 14 de Marzo como el Día Mundial de Lucha contra las Represas. Con el paso gradual de los años, los embalses de las represas se llenan de sedimento y se las acepta cada vez menos, eventualmente el desmantelamiento de las mismas será cada vez más común. Hacia el fin de las grandes represas. Sobre el tema existe un libro emblemático: “Ríos Silenciados – Ecología y Política de las Grandes Represas” de Patrick McCully, que desde su aparición en 1996 ha recorrido el mundo develando las profundas razones económicas, históricas y sociológicas que circulan por debajo de los argumentos con que se propagandizan las megarrepresas. De la versión en español del capítulo introductorio, tomada de la traducción recientemente realizada por Fundación PROTEGER, adelantamos un fragmento a modo de anticipo del libro en proceso de edición. “No existen dudas de que el apogeo de las represas ha llegado a su fin. Lo que no implica ! que no se construyan más represas ni que todas las represas existentes deban ser demolidas; pero significa que se han construido demasiadas. Más allá de los cantos de sirena está emergiendo un nuevo orden para los ríos y la gente que depende de ellos”. Patrick McCully
Cuando escribí Ríos Silenciados, los mejores datos disponibles que indicaban el promedio de inversiones en represas, estaban contenidos en un documento del Banco Mundial que revelaba que 70 represas hidroeléctricas financiadas por ellos mismos, eran en promedio, 30% más costosas de lo que se había proyectado. La Comisión Mundial de Represas (CMR) reveló posteriormente que el sobrecosto promedio de la construcción de 81 grandes represas de las cuales tenían datos era de 56%. Los sobrecostos eran aún peores en Asia Central y en Asia del Sur, donde trepaban hasta el 108 % y 138% respectivamente. A menudo se evidenciaban retrasos en los plazos de ejecución de los proyectos (de 99 represas de las cuales la CMR tenía datos sobre el plazo de ejecución, solamente 50 se culminaban dentro del año de la fecha proyectada).
Uno de los argumentos más comunes de quienes se oponen a las represas es que sistemáticamente se exacerban los beneficios que éstas brindan. La CMR suministra datos estadísticos que respaldan esta posición. La Comisión descubrió que las represas, frecuentemente, no alcanzaban los objetivos de funcionamiento; así comprobó que sobre 63 grandes represas hidroeléctricas, el 55 por ciento generaba menor energía de la que había sido proyectada.
La cuarta parte de 28 represas que alcanzaban o excedían la energía prevista, lo hacían debido a que se incrementaba la capacidad instalada (lo que implicaba mayores inversiones que las previstas). Si se tenía en cuenta el área irrigada y el volumen de agua aplicada a los suelos, donde son irrigados, las 52 represas analizadas estaban lejos de alcanzar estas metas. En promedio solamente el 70 por ciento del total previsto del área irrigada, se conseguía luego de cinco años de que supuestamente se concretara el proyecto y, sólo después de 15 años, se llegaba al 75 por ciento. Según la CMR las represas de riego más grandes tienen el peor récord, las que están por debajo de 30 metros y cuyos embalses ocupan menos de 10 kilómetros cuadrados, son las que más se aproximan a un funcionamiento óptimo. Las represas que suministran agua se encuentran muy lejos de los proyectos de irrigación. De 29 represas que suministran agua, sólo el 30 por ciento alcanzaba lo expuesto en los docume! ntos del proyecto. De 29 solamente 7 suministraban menos de la mitad del agua programada.
Costos sociales y ambientales
Los hallazgos de la CMR sobre los impactos sociales concuerdan con numerosos artículos de opositores a las represas: la gran pobreza provocada por las represas y el fracaso de las políticas de reasentamiento y de los planes que pretenden restituir el modo de vida a la gente desplazada. Represas y desarrollo describe el sufrimiento económico de la gente que vive en valles represados, la desintegración de sus comunidades y el incremento de los problemas mentales y físicos. Este informe subraya que las comunidades indígenas y campesinas han sido particularmente golpeadas. La comisión concluye diciendo que “el continuo fracaso al tratar de identificar un índice de impactos potenciales negativos junto con la implementación de programas adecuados de mitigación, reasentamiento y desarrollo para quienes han sido desplazados, y la permanente desconsideración por las comunidades aguas abajo de las grandes represas, han conducido al empobrecimiento y al sufrimiento de millones” . Ademá! s, agrega la Comisión, ‘es probable que los grupos más pobres y vulnerables, y las generaciones futuras carguen, desproporcionalmente, con los costos sociales y ambientales de los grandes proyectos, sin obtener una parte proporcional de los beneficios
económicos.’
En Ríos Silenciados se calculan entre 30 y 60 millones de personas desplazadas por represas. Sin embargo, la CMR estima que esta cifra oscila entre 40-80 millones. Este incremento se debe, en parte, a que se ha tenido en cuenta un mayor número de desplazados en India. En Ríos Silenciados utilicé un cálculo de 14 millones mientras que la CMR estimó entre 16-38 millones en su reporte final. Además la cifra más baja que utilicé de 30 millones desplazados en todo el mundo se relacionaba con la estadística oficial de 10.200.000 “reasentados” en China. Sin embargo, la CMR explica que las represas de la cuenca de Yang-tze desplazaron al menos 10 millones de personas.
Es muy raro que se involucren los impactos sociales y ambientales de los proyectos, que por otro lado resultan difícil o imposible de medir en términos monetarios. Uno se pregunta cuántas represas más se encontrarían viables si los costos totales y el funcionamiento real fueran
excluidos de las evaluaciones económicas.
Desmantelamiento de Represas
En los últimos cinco años el crecimiento del “Movimiento de Desmantelamiento de Represas” ha sido uno de los avances más impactantes, principalmente en Estados Unidos. Represas y Desarrollo, asegura que desde 1998 el número de represas en EE.UU. ha declinado, ya que el índice de construcción es inferior al de desmantelamiento. Aunque, para muchos parece una idea innovadora y radical, el desmantelamiento de las represas no es nada nuevo. Al menos 465 represas han sido desmanteladas en ríos norteamericanos desde 1912. La mayoría de las represas eran pequeñas, con una altura promedio de siete metros, aunque 27 eran consideradas grandes represas (15 mt. o más). Sin embargo el índice de desmantelamiento se acelera, en la década de 1990 se desmantelaron 177 represas, y 29 sólo en el año 1998.
El desmantelamiento de las represas se debe en mayor grado a razones de seguridad y económicas, teniendo en cuenta que es conveniente desmantelar antes que mantener una represa vieja y sedimentada. Un cuarto de las represas de EE.UU. tienen 50 años; para el 2000 se cree que esta cifra alcanzará el 85%. Los fundamentos ambientales se vuelven cada vez más comunes. La represa Edwards, en el tramo inferior del río Kennebec en Maine, se transformó en la primera represa desmantelada -1999- por razones ambientales, contradiciendo la voluntad de la empresa propietaria, debido a que el pasaje de los peces era más costoso que remover la misma represa. La orden provino de la Comisión Federal Reguladora de Energía (FERC, por sus siglas en inglés), que regula a miles de represas hidroeléctricas privadas en EE.UU. Un año después del desmantelamiento, el alewife, una especie de pez migratorio, retornó en gran cantidad al río del que había sido erradicado durante 170 años.
Fuera de EE.UU. muy pocas represas se han desmantelado, pero el movimiento gradualmente está ganando terreno internacional. Casi dos docenas de pequeñas represas se han desmantelado en British Colombia, Canadá, y el apoyo crece para desmantelar represas y devolver al río los
peces que tuvo. En Francia, se demolieron dos represas ubicadas en los tributarios del tramo superior del río Loira en 1998 para ayudar a la disminución del salmón. Las poblaciones de arenque, lamprea y salmón se incrementaron desde que las represas fueron demolidas.
Con el paso gradual de los años, los embalses de las represas se llenan de sedimento y se las acepta cada vez menos, eventualmente el desmantelamiento de las mismas será cada vez más común. El obstáculo más grande para removerlas será la falta de fondos. Este se convertirá en
un gran problema en pocas décadas, cuando las represas más grandes, construidas en países pobres, no puedan seguir financiándose ni tampoco se puedan desmantelar. El informe final de CMR recomienda que el diseño de la represa debe prever el desmantelamiento y que la autorización del proyecto debe indicar “la responsabilidad y los mecanismos para financiar los costos de desmantelamiento”. También advierte que los títulos podrían reservarse para cubrir los costos de desmantelamiento. En el Análisis financiero, económico y de distribución de la revisión temática de la CMR, se le brinda un mejor enfoque.
Un nuevo orden está emergiendo
Pese al crecimiento del movimiento de desmantelamiento, a la disminución en la construcción de represas, al fuerte mensaje transmitido por la CMR, es aún demasiado pronto para escribir el epitafio de la era de las grandes represas. Miles de ellas se encuentran en construcción o en las tablas de dibujo de los ingenieros. El Ministerio de Recursos Hídricos de China planea construir dos grandes represas sobre el Yangtze, río arriba de la represa Three Gorges; la represa Xiluodu de 14.400 MV (que sería la segunda represa más poderosa del mundo después de la Three Gorges); y la Xiangjiaba de 6000 MV.
El Ministerio de Recursos Hídricos, argumenta que China incrementará su capacidad instalada hidroeléctrica alrededor de 55.000 MV (lo que equivale a tres represas de la índole de la Three Gorges) entre el 2000 y el 2010, y a un ritmo similar durante cada década de este siglo.
En Brasil, los diseñadores todavía sueñan con una serie de grandes represas en el Amazonas. La más conocida es Belo Monte, una represa de 11.000 MV sobre el río Xingú en el estado de Pará. Esta represa se dio a conocer como Kararao en la década de 1980 y se convirtió en una célebre causa internacional, la oposición de los indígenas atrajo la llegada de celebridades como Sting.
Estos megaproyectos son aberraciones. No existen dudas de que el apogeo de las represas ha llegado a su fin. Lo que no implica que no se construyan más represas ni que todas las represas existentes deban ser demolidas; pero significa que se han construido demasiadas. Más allá de los cantos de sirena está emergiendo un nuevo orden para los ríos y la gente que depende de ellos.-
12 RAZONES PARA OPTAR POR ENERGÍAS RENOVABLES DESECHANDO LAS GRANDES REPRESAS
Este documento fue aprobado por más de 260 grupos y redes de organizaciones de todo el mundo, incluyendo el Grupo de Trabajo de Energía del Foro Brasileño de ONGs y Movimientos Sociales para el Medio Ambiente y Desarrollo, y la versión completa puede obtenerse en Inglés y Español en sitio de la Red Internacional de Ríos (IRN). Este resumen fue preparado para su distribución en la Conferencia Internacional sobre Energías Renovables celebrada en Bonn en junio de 2004.
ESTE DOCUMENTO PRESENTA 12 RAZONES PARA OPTAR POR ENERGÍAS RENOVABLES COMO LA SOLAR LA EÓLICA O LA DE PEQUEÑAS PRESAS, DESECHANDO LAS GRANDES REPRESAS DE GRAN IMPACTO AMBIENTAL Y SOCIOECONÓMICO
Doze Razões para Excluir as Grandes Barragens das Iniciativas para Energias Renováveis:
:: 1. Las grandes represas no tienen los beneficios de la reducción de la pobreza de la energía renovable descentralizada
Las grandes represas son intensivas en capital y dependientes de grandes centros de demanda y dependientes de largas líneas de trasmisión. Por el contrario, ” las nuevas fuentes de energía” puede ser pequeñas, dispersas geográficamente, minimizando los costes de transmisión y las pérdidas de energía y ampliando el alcance de los beneficios del desarrollo económico. Proveer servicios modernos de energía a un cuarto de la población mundial sin acceso a ellos, requiere un gran esfuerzo para ampliar las instalaciones de energía renovable descentralizada. La promoción de las grandes represas sólo distraer la atención y los fondos para este esfuerzo de descentralización.
:: 2. Incluir a las grandes represas en las iniciativas renovables agota los fondos para las nuevas energías renovables
Las grandes represas hidroeléctricas se encuentran entre los proyectos de infraestructura más caros del planeta. Incluir subsidios para las negociaciones sobre estas grandes hidroeléctricas consumen la mayor parte de los fondos especiales, dejando muy poco para la promoción de “nuevas energías renovables”.
:: 3. Los promotores de las grandes represas subestiman los costos y exageran los beneficios
Los promotores de las represas regularmente han subestimado los costos económicos de grandes proyectos hidroeléctricos, así como el número de personas que requieren de reasentamiento o compensación por las tierras perdidas, hogares perdidos y fuentes de sustento perdidas. Las grandes represas hidroeléctricas implican costos, en promedio, mucho más altos de lo previsto y generan bastante menos energía de la proyectada.
:: 4. Las grandes represas aumentan la vulnerabilidad al cambio climático
Los promotores de las grandes represas no tienen en cuenta los impactos hidrológicos del cambio climático. Esto significa que las presas se están construyendo sobre la base de proyectos que no admiten nuevos extremos de sequías e inundaciones que puede provocar el calentamiento global. Esto tiene serias implicaciones para el desempeño de las represas – en particular la sequía reduce notablemente la generación hidroeléctrica – y la seguridad.
:: 5. No existe el beneficio de la transferencia de tecnología en las Grandes Represas
Se supone que los fondos mundiales para las energías renovables y los mecanismos del comercio de carbono, facilitan la transferencia de tecnologías desde el hemisferio norte hacia el hemisferio sur y prestan apoyo necesario para aumentar la producción y reducir los costes unitarios de estas tecnologías. Estos argumentos no se aplican a las grandes represas, ya que son una tecnología madura y bien establecida en el hemisferio sur.
:: 6. Las grandes presas implica grandes impactos sociales y ecológicos
Según la Comisión Mundial de Represas (CMR), las grandes represas son responsables del desplazamiento de 40 millones a 80 millones de personas, muchos de los desplazados no reciben compensación o la reciben solo parcialmente. Millones de personas también han perdido sus tierras y modos de vida y han sufrido a causa de los efectos posteriores y otros impactos indirectos de las grandes represas. Las grandes represas son un factor importante en la rápida disminución de la biodiversidad en los ríos.
:: 7. El esfuerzo para mitigar los impactos de las grandes presas suele fallar
Muchos impactos de las grandes represas no están reconocidos o son subestimados, y las medidas para evitar o reducir sus consecuencias a menudo fallan. Incluso cuando las personas son reconocidas como elegibles para el reasentamiento, rara vez se han restablecido sus medios de subsistencia. Hay un registro asombroso de esfuerzos similares fallidos para mitigar los impactos ambientales de las grandes represas.
:: 8. Los promotores de las grandes represas se opone a las medidas que limitan la construcción de proyectos antiecológicos y destructivos
La CMB (Comissão Mundial de Barragens)(Comisión Mundial de Represas) ha desarrollado criterios para la planificación energética y el uso de agua que puede alentar mejores alternativas, y reducir los impactos de los proyectos existentes. Gracias a ella, ahora se construyen menos represas. Los proponentes de las represas, como el Banco Mundial y la International Hydropower Association, atacan la credibilidad de la CMB y presionan para impedir la aplicación de sus recomendaciones.
:: 9. Los grandes embalses pueden emitir grandes cantidades de gases de efecto invernadero
La descomposición de materia orgánica en los embalses provoca la emisión de metano y dióxido de carbono. A pesar de que todavía hay mucha controversia acerca de la magnitud de las emisiones de las presas, si se las compara con las emisiones de plantas de combustibles fósiles, se ve que los proyectos hidroeléctricos con grandes embalses en los trópicos, tienen un impacto climático mayor por unidad de energía, que la generación basada en los combustibles fósiles.
.
:: 10. Las grandes represas se construyen lentamente y por etapas, y cada vez se vuelven más costosas
Debido a su gran tamaño y los requisitos particulares de ubicación, la construcción de grandes represas toma más tiempo y es más cara que otros tipos de plantas para generar energía. Mientras que las grandes centrales eléctricas demoran unos seis años, las turbinas de viento y los paneles solares pueden empezar a proporcionar los beneficios y pagar los préstamos en cuestión de meses desde el inicio de su construcción.
El Banco Mundial encontró que el costo de generación hidroeléctrico está en continuo aumento, debido a que los mejores saltos hidroeléctricos ya han sido explotados.
Las grandes hidroeléctricas añaden redes de transmisión de alta capacidad, de forma discontinua, ya que la demanda por lo general crece gradualmente. Adiciones de tendido eléctrico de este tipo, pueden significar el racionamiento súbito de la energía, antes de que la nueva capacidad esté disponible, y encarecimientos consecuentes.
:: 11. Muchos países ya están demasiado dependiente de la energía hidroeléctrica
Las grandes represas contribuyen con más de la mitad del suministro total de energía en 63 países, casi todos en el hemisferio sur y en la antigua Unión Soviética. Muchos de estos países sufren restricciones de energía eléctrica, inducida por la sequía, un problema de se espera que se agrave por el cambio climático. A pesar de ello, es en estos países donde se planean la mayoría de los proyectos de nuevas represas.
:: 12. Los embalses de las grandes represas son frecuentemente declarados no renovables por la sedimentación
Los embalses de plantas hidroeléctricas se reducen con el tiempo debido a la sedimentación, un problema grave que puede disminuir o poner fin a la capacidad de una planta de generación de energía. La gran carga anual de sedimentos se produce en periodos de inundación. La mayor intensidad y frecuencia de las inundaciones debido al calentamiento global, aumentará las tasas de sedimentación y reducirá la vida útil de las grandes represas, que ahora está calculada en escasos 50 años y que será incluso menor en circunstancias de Calentamiento Global
ENLACE: Doze Razões para Excluir as Grandes Barragens das Iniciativas para Energias Renováveis.
ESTE DOCUMENTO PRESENTA 12 RAZONES PARA OPTAR POR ENERGÍAS RENOVABLES COMO LA SOLAR LA EÓLICA O LA DE PEQUEÑAS PRESAS, DESECHANDO LAS GRANDES REPRESAS DE GRAN IMPACTO AMBIENTAL Y SOCIOECONÓMICO
GRANDES REPRESAS:Brasil conmemoran Día Internacional de Lucha contra las Represas
17 de marzo de 2009
Las poblaciones damnificadas por las represas de todo el mundo volvieron a repudiar este 14 de marzo el modelo energético extractivo. Exigieron la implementación de proyectos de energía alternativos. El Movimiento de Damnificados por Represas de Brasil realizó actividades de protesta en contra de la construcción de hidroeléctricas en la región.
Leer más en la página web agenciapulsar.org
BANCO MUNDIAL PROMUEVE PRIVATIZACIONES DEL AGUA
Dado que la demanda de agua mundial supera a la oferta, el represamiento del agua es una forma de asegurar el abastecimiento del líquido elemento.
El caso de la REPRESA de Salta Grande, compartida por Argentina y Uruguay que se quedó sin agua, puede ser ilustrativo. Nadie parece asociar su agotamiento con las nuevas REPRESAS construidas sobre el Río Uruguay. Allí existen una larga cadena de REPRESAS: la Passo Fundo, la Itá y la represa Machadinho, son las más importantes. Las últimas dos fueron construidas en los últimos 5 años. En tanto la situación hidrológica sea más o menos normal, los reservorios de las represas se mantienen en un nivel más o menos constante y el agua fluye río abajo sin mayores inconvenientes. Sin embargo, cuando la situación hidrológica no es buena –como es el caso actual- los operadores de las REPRESAS brasileñas y argentino / brasileñas retienen el agua lo más posible para tener reservas ante las eventuales crisis inmediatas. Pero como están aguas arriba, la acumulación de agua en las sus REPRESAS impide el natural ciclo del río Uruguay y el agua entonces ya no llega más abajo, afectando especialmente a Uruguay.”
Este problema se puede agravar pues varias más van a ser construidas: la REPRESA San Pedro, la REPRESA Garabí, la REPRESA Roncador, la REPRESA Itapiranga y la REPRESA Foz de Chapecó, todas sobre el río Uruguay o sus tributarios. Y hay otras varias en la cuenca previstas, exclusivamente con fines de riego. ¿Cuánta agua quedará disponible en el río Uruguay en las sequías de los próximos años?
El director general del Instituto Internacional del Manejo del Agua, Colin Chartres, sostuvo el 2008 que las causas de la escasez hídrica son esencialmente las mismas de la crisis alimentaria. «Hay factores serios y extremadamente preocupantes que indican que las fuentes de suministro de agua está cerca de agotarse en algunos países», expresó. Chartres destacó que, según las estimaciones actuales, el mundo no tendrá suficiente agua para abastecerse en 40 años, «para cuando la actual crisis alimentaria puede convertirse en perpetua. «Si se quiere evitar consecuencias nefastas» subrayó, se requieren inversiones significativas en investigación y desarrollo de infraestructura hídrica.
El Instituto Internacional para el Manejo del Agua (IWMI por sus siglas en inglés: http://www.lk.iwmi.org/spanish/sp_home.htm) es una organización de investigación científica cuyo enfoque principal es el uso del agua en la agricultura y las necesidades de agua de los países en vías de desarrollo.
Algunas naciones, y el Banco Mundial consideran que los recursos para la investigación y desarrollo de infraestructura hídrica tienen que provenir de la inversión privada. El Banco Mundial condiciona sus préstamos para el desarrollo de la infraestructura hidráulica a la privatización del sector.
En algunos países esa experiencia se ha desarrollado, y sus consecuencias han sido negativas para la población. Un recurso natural, fundamental para la vida, no puede constituirse en una mercancía.
El Comentario General sobre el derecho al agua, adoptado en noviembre de 2002 por el Pacto sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales (CESCR en inglés) debe marca un hito en la historia de los derechos humanos. Por primera vez el agua es reconocida de forma explícita como un derecho humano fundamental, y los 145 países que ratificaron el CESCR International se verán ahora obligados a asegurar progresivamente que todos tengan acceso al agua potable segura, de forma equitativa y sin discriminación. Allí se señala que: «el derecho humano al agua otorga derecho a todos a contar con agua suficiente, a precio asequible, físicamente accesible, segura y de calidad aceptable para usos personales y domésticos».
Algunos pueblos han reaccionado a la privatización del sector hidráulico y con su lucha lograron que el acceso al agua se considerara un derecho humano fundamental incluido en la Constitución de sus países e impidiendo las privatizaciones en el agua y el saneamiento. En otros países lograron revertir las privatizaciones, como Bolivia, Uruguay, y en algunas regiones de Argentina y Francia.
En la Semana Mundial del Agua de 2008 en Estocolmo, Lars Thunell, vicepresidente ejecutivo de la Corporación Financiera Internacional, dependiente del Banco Mundial, promovió el negocio de «proveer agua limpia y servicios de saneamiento» como una oportunidad de negocios.
Agregó que los inversores ven una oportunidad en el sector hídrico mundial, de 450,000 millones de dólares, donde las acciones tienen un fuerte desempeño en todo el mundo.
Señaló que algunas firmas privadas también ven al suministro de agua como un riesgo empresarial y lo afrontan como parte integral de su estrategia de manejo de riesgos.
«Creo que el momento es correcto. Podemos evitar una crisis como socios, trabajando juntos», dijo Thunell al invitar a que los gobiernos concedan los servicios de agua y saneamiento a las empresas privadas, total o parcialmente. Añadió que la Corporación hará lo suyo invirtiendo en compañías que buscan oportunidades en la conservación y la calidad del agua, y fomentando asociaciones público-privadas en el sector hídrico.
Al insistir en su llamado a las privatizaciones, Thunell vicepresidente ejecutivo de la Corporación Financiera Internacional, recordó que «el espectro de una crisis que envuelva a los alimentos, el combustible y el agua» asedia a la mayoría de las naciones en desarrollo, lo que a su juicio les impide afrontar las inversiones necesarias. «La escasez de agua plantea una amenaza al suministro alimentario justo cuando el sector agrícola intensifica la producción, en respuesta a los disturbios por el encarecimiento de los alimentos y el aumento del hambre y la malnutrición» subrayó.
Explicó que la creciente demanda de agua está superando a la oferta. Se espera que la población mundial, de unos 6.000 millones de habitantes, aumente a alrededor de 9.000 millones para 2050, con más de 60 por ciento viviendo en megaciudades.
«Como el consumo de agua aumenta donde hay desarrollo y estilos de vida mejorados, podemos esperar demandas incluso mayores de agua dulce», dijo Thunell. La agricultura, sector que hace un uso intensivo del líquido, se está expandiendo, y la industrialización y la producción energética están guiando la demanda, concluyó.
CABE PREGUNTARSE TRAS LA INMINENTE PRIVATIZACIÓN DEL AGUA … QUE VENDRÁ DESPUÉS? … LA PRIVATIZACIÓN DEL AIRE?