Imagen: Kipu
- Según el último reporte del IPCC, si las emisiones de carbono no llegan a su máximo histórico hasta el 2025 y la temperatura sigue aumentando, es poco probable que el planeta sea habitable para 2050.
Impulsado por el activista por la paz John McConnell en 1969, tras la Conferencia de la UNESCO en San Francisco, y luego confirmado por el senador de los Estados Unidos Gaylord Nelson, en 1970, como una fecha para promover la armonía con la naturaleza, el 22 de abril de cada año se celebra Día Internacional de la Madre Tierra.
No obstante, la situación actual de la Tierra está muy lejos de una celebración. Según el último Reporte del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) 2022, es poco probable que el planeta sea habitable para 2050. Las conclusiones provienen de un consenso de más de 18 mil artículos e investigaciones científicas acerca de la actual crisis climática.
Se estima que, si las emisiones de carbono no llegan a su máximo histórico hasta el 2025, nos esperarían olas de calor más intensas, incendios forestales avasalladores, huracanes devastadores y sequías más prolongadas.
António Guterres, secretario general de Naciones Unidas, indicó enérgicamente que esto «no es un escenario de ficción». En un discurso enfático, el mandatario manifestó que “es hora de que dejemos de quemar nuestro planeta y empecemos a invertir en las abundantes energías renovables que nos rodean”.
El reporte del IPCC 2022 considera casi imposible detener el avance de la crisis climática y apuesta por mitigar sus efectos, además de cumplir las recomendaciones para salvar a la Madre Tierra. ¿Cuáles son estas?
Reducir sustancialmente el uso de combustibles fósiles, ampliar el acceso a la electricidad, mejorar la eficiencia energética y aumentar el uso de combustibles alternativos, como el hidrógeno son algunas de las acciones a tomar, explica la ONU.
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