Retos y demandas de la educación intercultural bilingüe en el segundo año de pandemia

Foto: Diego Pérez

  • En el Día del Maestro, conversamos con el profesor y dirigente de la Federación del Río Madre de Dios y Afluentes (Fenamad), José Antonio Dumas Ramos, quien precisó que este año las clases presenciales se han retomado en las comunidades nativas más alejadas de Madre de Dios. 

Por Fiorella Fiestas / ffiestas@spda.org.pe

 

El impacto de la pandemia en la Educación Intercultural Bilingüe (EIB) en el 2020, provocó que aproximadamente 1.2 millones de estudiantes indígenas dejaran de acudir a casi 27 mil instituciones educativas donde se imparte el servicio educativo intercultural bilingüe. Hoy en el Día del Maestro, conversamos con el profesor José Antonio Dumas Ramos, dirigente de la Federación del Río Madre de Dios y Afluentes (Fenamad), quien detalló las medidas adoptadas este año para sobrellevar esta problemática en las comunidades nativas de Madre de Dios, y cuáles son los principales retos y demandas que faltan afrontar.

En agosto del año pasado, 92 750 estudiantes de escuelas públicas accedieron a la estrategia «Aprendo en casa», sin recibir un plan de recuperación de clases previo. Ese mismo año, la Defensoría del Pueblo reiteró la necesidad de que el Ministerio de Educación (Minedu) y las autoridades regionales revisen la estrategia educativa en los ámbitos rurales por una alta tasa de abandono escolar.

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De acuerdo a su informe, la región de Loreto lideró la lista con el mayor número de estudiantes de instituciones educativas pública sin acceso a «Aprendo en casa» (79 786), seguido por Ucayali (53 292) y San Martín (31 092).

“Este año las comunidades han estado muy preocupadas, porque los chicos perdieron el año escolar en el 2020. Sin embargo, salió la medida que igual todos pasarían de año, pero eso igual es preocupante. A partir de esa experiencia desde las comunidades se decidió que este año se iba a trabajar de manera presencial, para que ya no pierdan clases”, detalló Dumas a Actualidad Ambiental.

“Las comunidades que están a una o dos horas de las zonas urbanas han hecho clases virtuales o entregado copias, pero las alejadas, ubicadas en el alto Madre de Dios, han perdido clases. Si bien por la modalidad de contrato los docentes fueron contratados a inicios de año, estos estuvieron 30 días en la comunidad y luego regresaron a la ciudad», agregó el representante de Fenamad.

Para evitar que los profesores se retiren de las comunidades los padres les solicitaron que se constituyan en las comunidades. Para ello, ayudaron a implementar todas las medidas de bioseguridad. «Una vez que los profesores eran contratados hacían cuarentena y luego dictaban. De esta manera, en las comunidades más cercanas a la ciudad de Puerto Maldonado se realiza educación a distancia y, en las alejadas, clases presenciales», precisó el dirigente.

Foto: Diego Pérez

Demanda de los pueblos indígenas

La pandemia del COVID-19 evidenció innumerables desigualdades preexistentes. Una de ellas fue el problema de la conectividad y la entrega de dispositivos electrónicos para afrontar la educación remota. Tal es el caso de la distribución de 1 056 430 tabletas destinadas a estudiantes y docentes de instituciones educativas focalizadas de zonas rurales y urbanas como parte de la estrategia del Ministerio de Educación para el cierre de brecha digital. Sin embargo, esta campaña fue opacada por demoras en su entrega.

“No sé cuál fue el criterio de la entrega. Han preferido priorizar escuelas emblemáticas que consideramos tienen recursos para conectarse a internet y no a las comunidades nativas más alejadas. Podría decir que las tabletas en algunas comunidades no han llegado y también se ve que los mismos estudiantes no saben usarlas”, explicó Dumas.

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Agregó que cada localidad es diferente y no todos los niños viven cerca a los puestos donde se han instalado el internet, algunos incluso viven a media hora de distancia. “Eso dificulta que se puedan conectar. Y si lo hacen, la red soporta apenas a 3 o 4 estudiantes, luego se cae”, aseguró.

Foto: Diego Pérez

Proceso de vacunación

El pasado 21 de junio inició el proceso de vacunación a los ciudadanos indígenas que residen en la ciudad de Puerto Maldonado, entre ellos los estudiantes de educación superior. Desde Fenamad se impulsó el plan de vacunación para brindar tranquilidad a sus padres y lograr su continuidad en sus estudios.

«Casi en su totalidad los jóvenes han sido vacunados. Algunos no han podido vacunarse, porque no lograron inscribirse. Por motivo de la pandemia algunos han retornado a sus comunidades y sus papás ya no han querido que regresen a la ciudad y finalmente han perdido su ciclo educativo. Otros, porque en redes hay desinformación. Nosotros hemos ido con el mensaje, pero nos preocupa, existe una contracampaña, pero nosotros seguiremos yendo con nuestro mensaje para que cada uno de ellos se logre vacunar», finalizó Dumas.

Lee aquí la publicación: El derecho de los pueblos indígenas a una educación intercultural bilingüe (EIB) en tiempos de COVID-19

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