• Marcelina lidera un grupo de más de 60 vigilantes comunales que resisten el avance de los mineros ilegales en Alto Nanay. Por este trabajo, Marcelina ha recibido ataques y amenazas de muerte.

 

Desde una comunidad campesina ubicada a más de cuatro horas de viaje fluvial de la ciudad de Iquitos (Loreto), Marcelina Angulo lidera un grupo de 68 vigilantes comunales que resisten el avance de la minería ilegal en la cuenca del Pintuyacu. Su trabajo y lucha por los derechos de su comunidad, así como el cuidado del río y los bosques la tienen hoy bajo amenaza de muerte. Sin embargo, Marcelina se niega a dejar de luchar porque quiere que sus hijos y los hijos de sus hijos “puedan contemplar lo hermoso y majestuoso que es el bosque y la Amazonía”, y gocen de los beneficios que esta da a las comunidades.

En el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, un día para reflexionar sobre las brechas de acceso a derechos a las que se enfrentan diariamente millones de mujeres en todo el mundo, sobre todo aquellas mujeres racializadas y precarizadas, Actualidad Ambiental conversó con Marcelina para conocer más sobre su lucha y motivaciones como defensora ambiental en Loreto.

¿Qué es el bosque para las mujeres amazónicas y cuál es el rol de estas en su cuidado?

El bosque para mí como mujer amazónica, representa nuestro hogar, nuestra cultura y la vida para nosotras y nuestras comunidades, porque el bosque es nuestro mercado de subsistencia donde encontramos los alimentos, el bosque es nuestra farmacia medicinal donde encontramos las cortezas, raíces, hojas, tallos y hierbas para curarnos de las enfermedades. Y nosotras las mujeres somos clave en su conservación, protección y vigilancia. Nosotras somos clave para que nuestros bosques y la Amazonía se mantengan en pie. Nosotras luchamos en beneficio de nuestras comunidades, las ciudades, para el país y para el resto del mundo.

¿Cuál es la lucha actual de las comunidades en Alto Nanay?

Nosotros (en las comunidades del Pintuyacu) nos hemos organizado para hacer la vigilancia por el cuidado que debemos tener frente a la minería ilegal que nos amenaza. Empezó en el río Nanay, pero ahora ya sabemos hace meses que también hay dragas en el Chambira y en el Pintuyacu. Y no tenemos apoyo, eso es lo más preocupante; ya hemos gritado esto a los cuatro vientos y no nos apoyan, no sé qué es lo que esperan que pase en nuestras cuencas. Nosotros esperamos que el Estado nos escuche, que el presidente regional o los alcaldes vean por Alto Nanay, que se preocupen por nuestra salud y educación también.

Por el trabajo de vigilancia que realiza, ¿ha recibido amenazas?, ¿teme por su vida?

Desde que empezamos la vigilancia hemos tenido amenazas. No solo yo, hemos sido amenazados 28 vigilantes. A mí me han dicho un día “tu cabeza queremos porque tú eres la que los mueve… te voy a dar donde más te duele”, así me han dicho. También, hace casi dos meses, que nos han disparado. Venían despacito (en una embarcación), preparándose, al parecer borrachos nos gritaban, y dispararon una, dos, tres, cuatro veces. Los vigilantes corrieron a esconderse, al suelo se tumbaron.

[Marcelina narra un ataque que sufrieron cuando realizaban su trabajo de vigilancia en el puerto de su comunidad, desde donde revisan las embarcaciones que pasan por su cuenca a fin de impedir el pase de combustible o insumos presuntamente destinados a la minería ilegal].

Lamentablemente yo temo por mi vida, porque estoy en peligro hace mucho tiempo, peor ahora y temo que en el cualquier momento deje de existir Marcelina Angulo.

[Ver además ► Atacan y amenazan de muerte a quienes se oponen a dragas de minería ilegal en el Alto Nanay]

¿Por qué continúa en lucha a pesar de las amenazas?

Como mujer amazónica, como amazónica, me gustaría que mis hijos y los hijos de mis hijos también puedan contemplar lo hermoso y majestuoso que es el bosque y la Amazonía, y los beneficios que el bosque nos trae a nosotros como comunidades, porque sin bosque no hay vida. Si nosotros permitimos la minería, ¿cómo vamos a quedar en nuestra cuenca? Nos vamos a quedar con una cuenca contaminada, con el río y los peces contaminados.

¿Qué es lo que espera de las autoridades y de la ciudadanía de Iquitos?

Lo que queremos nosotros es que, las autoridades y la ciudad de Iquitos, inmediatamente saquen a los mineros que están dentro de nuestra área de conservación que no solo están dragando en el río, sino que también están depredando nuestros bosques. Le pido a la ciudad de Iquitos que se unan contra la minería, toda la población e instituciones, porque el agua que toman es del Alto Nanay.