Conoce al zorro andino: características, hábitat y su rol en el ecosistema
- El zorro andino cumple un rol clave en el ecosistema. Sin embargo, la caza y el tráfico ilegal ponen en riesgo sus poblaciones en Perú y otros países de Sudamérica.
miércoles
26 de marzo, 2025

Foto: Andina
Por Mia Ramírez / vramirez@spda.org.pe
En los altos paisajes de la Cordillera de los Andes, habita un depredador ágil y astuto que cumple un rol clave en el equilibrio ecológico: el zorro andino (Lycalopex culpaeus). Este cánido, también conocido como zorro culpeo o zorro colorado, es el segundo más grande de Sudamérica. Su presencia no solo contribuye al control de la población de roedores, sino que también cumple un rol como dispensador de semillas y ayuda en la descomposición de la carroña.
A pesar de su importancia ecológica y cultural, el zorro andino enfrenta amenazas que ponen en riesgo su supervivencia. La caza para la venta ilegal de sus crías y partes de su cuerpo, utilizadas como amuletos, han hecho de esta especie una de las más afectadas por el tráfico de fauna silvestre en la región.
Características
El zorro andino (Lycalopex culpaeus) es una especie perteneciente a la familia de los cánidos y es el más grande de las tres especies de zorro distribuidas en el Perú (zorro costeño, zorro gris y zorro andino), según el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor).
Se caracteriza por su pelaje tupido rojizo con tonalidades marrón oscuro y algunas áreas blanquecinas. Su cuerpo es flexible, con piernas delgadas, y nariz y orejas de apariencia triangular. Cuando son adultos, pueden llegar a medir entre 60 a 115 cm de longitud y pesar hasta 14 kg, mientras que los recién nacidos pesan 170 g en promedio.
Es un animal omnívoro con una dieta muy variada. Se alimenta principalmente de vertebrados pequeños y medianos, como roedores, lagomorfos, ovinos y aves. Ocasionalmente, se alimenta de frutos, semillas, restos vegetales e invertebrados.
Son animales muy solitarios y su carácter varía según donde se encuentre. Según el Ministerio del Ambiente (Minam), esta especie es activa durante el día en ambientes no intervenidos, pero cuando hay presencia humana su actividad es nocturna y al amanecer, aunque varía de acuerdo a las zonas geográficas y épocas del año.
Su madurez sexual se obtiene cerca del año de vida, y las hembras pueden dar a luz a 3 y 8 crías al menos una vez al año. Usualmente la hembra cuida a las crías, mientras que el macho sale a cazar en las horas nocturnas y diurnas. A partir del tercer mes, los cachorros salen a cazar por su cuenta para luego ser independientes.

Foto: Andina
Distribución
Habita en la región altoandina del Perú y se distribuye desde Ecuador, Colombia, Bolivia, Argentina y Chile. Debido a su amplia distribución, se puede adaptar a distintos tipos de hábitat, como la puna húmeda, áreas boscosas, páramos andinos, matorrales, pastizales, desiertos y bosques montanos, principalmente en la zona oriental de la Cordillera de los Andes.
En Lima, vecinos de La Molina han reportado casos de avistamiento de zorro andino, lo cual ha generado asombro y preocupación. Ante los pedidos de captura y reubicación, el Serfor aclaró que estos animales siempre han habitado esta zona y que son parte de su hábitat natural. Especialmente, durante las temporadas de lluvia en la costa, el reverdecimiento y el aumento de vegetación atraen a lagartijas, pericotes y aves pequeñas, presas naturales del zorro andino, lo que explica su mayor presencia en áreas urbanas.
Según informó Víctor Vargas, biólogo y especialista en fauna silvestre, en una entrevista con La República, esta especie puede habitar “básicamente aquellos distritos que colindan con las lomas, las montañas, los cerros”, como La Molina, Chosica, Cieneguilla, entre otros.

Foto: Municipalidad de La Molina
Importancia del zorro andino
Esta especie cumple un rol fundamental en los ecosistemas que habita por su rol como depredador, que ayuda a controlar la población de roedores, evitando su sobrepoblación y el impacto negativo en los cultivos y la vegetación. Además, actúa como dispersador de semillas y contribuye a la biodegradación de la carroña.
En la cosmovisión andina, este animal ha estado siempre presente como símbolo de astucia y aparece en múltiples mitos y leyendas como un ser profanador, sigiloso y travieso. Para las comunidades aymaras, es conocido como el “perro protector del mallku”, es decir, la mascota de los espíritus de las montañas.
Amenazas
Aunque se encuentra categorizado como en “Menor Preocupación” según la Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN, este cánido enfrenta amenazas que ponen en riesgo su supervivencia. Sus principales amenazas son la venta ilegal de crías de zorro andino y su caza para vender partes de su cuerpo como amuletos. La piel de esta especie es utilizada para la creación de vestimentas y sus colas son usadas como amuletos para “atraer la buena suerte”.
El zorro andino se encuentra entre las principales especies más frecuentemente halladas durante operativos policiales por tráfico de fauna silvestre. Según la ATFFS, con frecuencia se confiscan partes de las patas, la cola o la cabeza, así como crías de zorro andino.
Al ser un animal representado en la cosmovisión andina como astuto e inteligente, se suele tener creencias erróneas que le atribuyen propiedades mágicas. Un informe realizado por la Universidad Nacional Agraria La Molina, en 2008, en Ayacucho, señaló que el 60 % de los entrevistados aseguraban que el penacho negro de la cola extraída de un zorro vivo sirve como amuleto de la suerte para la “atracción del amor” y la “prosperidad en los negocios”.
De igual manera, David Kasa, comunicador nativo de Bolivia, señala que la comunidad aymara tiene la creencia de que su cola puede hacer que las personas obtengan la capacidad de persuasión.

Foto: Serfor
Debe estar conectado para enviar un comentario.