El día de hoy se debe discutir en la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso el proyecto de ley que somete a aprobación el Acuerdo Energético Perú – Brasil. Ante esto, un grupo de organizaciones civiles demandaron al Parlamento revisar el procedimiento que ha posibilitado que este proyecto ingrese a la comisión, proceso al que calificaron de “apresurado e irregular”.
Entre las organizaciones destaca el Centro para la Sostenibilidad Ambiental – Universidad Peruana Cayetano Heredia (CSA); la Decanatura de Derecho – Universidad Científica del Sur; ProNaturaleza – Fundación Peruana para la Conservación de la Naturaleza; Central Asháninka del Río Ene (CARE); la Asociación Servicios Educativos Rurales (SER); la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA); Derecho, Ambiente y Recursos Naturales (DAR) y Forum Solidaridad Perú (FSP).
De acuerdo a este grupo, este proyecto no ha cumplido con las condiciones previstas en el Reglamento del Congreso, debido a que el expediente presentado al Congreso carece del informe sustentatorio requerido. Además, ese documento ha sido presentado por la Cancillería como un mero trámite de actualización junto con un bloque de otros proyectos de tratados internacionales asumidos por el gobierno anterior.
En una nota de prensa conjunta, estas las organizaciones civiles destacaron: “Este Acuerdo, donde el Perú se compromete a fijar su demanda energética y los precios del mercado regulado por treinta años, para garantizar el suministro de energía a una potencia extranjera, no puede ser objeto de un trámite apresurado. Requiere, por el contrario, una revisión cuidadosa, informada y transparente, con participación ciudadana. Esto ha sido exigido repetidamente por la sociedad civil”.
En esta misma línea, se solicitó al Gobierno “revisar y definir” la estrategia nacional de desarrollo energético, convocando a un debate nacional técnicamente informado, transparente y participativo. “Esto incluye la necesidad imperiosa de mejorar los procesos nacionales de licenciamiento ambiental y social de proyectos energéticos, que hoy son inferiores a los estándares internacionales, incluidos los del Brasil”.
“El Acuerdo energético con Brasil debe ser profundamente revisado y renegociado, para garantizar que sus términos correspondan a un tratado justo y equitativo entre naciones hermanas, donde tanto los beneficios como los costos y riesgos sean adecuadamente compartidos”, agrega la nota.
Ver comunicado conjunto
Comments are closed here.