El último domingo un reportaje denunció que ciudadanos chinos compran maca en estado natural en grandes cantidades para llevarla a su país, burlando los controles aduaneros. Pese a estar prohibido este tipo de comercialización, se calcula que ya han logrado comprar más de dos mil toneladas de las 4500 toneladas de la producción de maca correspondiente a este año.

Al respecto, Carla Bengoa abogada del Programa de Biodiversidad y Asuntos Internacionales de la SPDA, explicó que la exportación de maca en dicho estado está prohibida y solo puede exportarse con fines de investigación, según figura en el Decreto Supremo 039-2003-AG.

“La exportación de semillas botánicas, vegetativas, especímenes, productos y subproductos de la maca (sea que se encuentren en estado natural o que hayan atravesado por un proceso de transformación primaria) se encuentra prohibida, salvo que esta tenga fines de investigación. Solo en este último supuesto, el acceso a la maca -y su posterior exportación- se realiza a partir de contratos de adhesión denominados ‘Acuerdos de Transferencia de Material (ATM)’, que se celebran entre los investigadores y el Estado Peruano”, indicó.

“Ahora, dado que el Perú no ha suscrito ATM con fines de acceso a maca, la salida de este recurso (en las formas mencionadas) hacia China, necesariamente, se produjo de forma no autorizada, configurándose el delito de tráfico ilegal de recursos genéticos”, agregó.

Ver reportaje de Cuarto Poder:

UN CASO DE BIOPIRATERÍA

Bengoa también alertó que la maca de origen peruano, una vez en China es usada para desarrollar una serie de invenciones sobre las cuales se han solicitado patentes.

“El problema aquí es que, de acuerdo con instrumentos internacionales y legislación interna sobre la materia, el acceso y uso de los recursos genéticos se encuentra supeditado a la celebración de contratos de acceso con el Estado, en los que este y el interesado en acceder a sus recursos, negocian los fines de dicho acceso y las condiciones en las que esta se dará, incluyendo la distribución de los beneficios que se obtengan”, señaló.

Según la especialista, la protección de invenciones obtenidas a partir de recursos genéticos de origen peruano a través de instrumentos como las patentes, sin contar con un contrato de acceso previo, da como resultado un caso de biopiratería (Instrumentos como el Protocolo de Nagoya, agregó, buscan evitar este tipo de situaciones). Sin embargo, agregó, hay que tener mucho cuidado con las fechas. Así, si el acceso a la maca se dio ya hace mucho, cabe la posibilidad de que no le sean aplicables las normas sobre la materia.

La Comisión Nacional Contra la Biopiratería anunció que en la actualidad, China habría presentado 92 solicitudes de patente relacionadas a la maca. Siete de ellas serían por mejoramiento genético del tubérculo.

CONGRESO ANUNCIÓ INVESTIGACIÓN

Frente a la denuncia, la Comisión de Comercio Exterior anunció que investigarán este caso y para ello solicitarán la presencia de la ministra de Comercio Exterior y Turismo, Magali Silva, y los titulares del Interior y de Agricultura y Riego, Daniel Urresti y Juan Benítez, respectivamente.

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Foto: Thomas Müller