Luego de la reunión que sostuvo Ollanta Humala con el presidente regional de Junín, Vladimir Cerrón, y los alcaldes provinciales, el Gobierno se comprometió a garantizar la estabilidad laboral de los 3 mil 500 trabajadores del Complejo Metalúrgico de La Oroya.

«El gobierno se está comprometiendo a mantener la estabilidad laboral de los trabajadores. Además, se respetarán todos los pactos colectivos y los convenios laborales que se han suscrito hasta el momento por los derechos de los trabajadores», manifestó Cerrón.

«La expresión es un término técnico, ya que lo que está haciendo el Estado en el fondo es una reestructuración, por lo que se garantiza la independencia de los acreedores, la reapertura del centro metalúrgico y que los trabajadores seguirán cobrando sus haberes, los que serán pagados por Cobriza», agregó en declaraciones a La República.

TRABAJADORES DE DOE RUN: EL GOBIERNO NO ES NUESTRO PATRÓN

El Secretario General del Sindicato de Trabajadores Metalúrgicos de Doe Run, Roberto Guzmán, afirmó que ellos son empleados de la empresa privada y el Gobierno no puede garantizar el pago de sus sueldos.

Guzmán aclaró que «el Gobierno no es nuestro patrón» al cuestionar que queden garantizados los derechos adquiridos con la minera que está en proceso de liquidación.

El dirigente recordó que los trabajadores tienen un vínculo laboral vigente con Doe Run, hasta el 2013. En ese sentido, reiteró el pedido de un reinicio de las operaciones del Complejo Metalúrgico de La Oroya, porque «queremos trabajar».

Asimismo, expresó su molestia porque su gremio no pudo reunirse con el Presidente de la República, pese a que ya habían acordado una reunión.

«Ollanta Humala perdió la oportunidad de dar la cara al pueblo y cumplir su palabra como varón, que hipotecó en Huancayo. Dijo que iba a resolver el problema de La Oroya», declaró en RPP.