Gracias al uso de drones, el Sernanp ya pudo identificar pequeños grupos de mineros ilegales dentro de la RN Tambopata. Foto: Otto Alegre.

Miembros de la Reserva Nacional Tambopata y su Comité de Gestión fueron capacitados en el manejo de drones (vehículos aéreos no tripulados) con el fin de usar estos aparatos en las actividades de monitoreo y vigilancia de la mencionada área natural protegida, ubicada en Madre de Dios.

Como ya se ha evidenciado a través de diversas denuncias e informes, uno de los problemas más críticos que enfrenta la Reserva es la invasión de mineros ilegales. Pese a que a mediados de enero, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Sernanp) con ayuda de la Marina recuperaron cerca de 500 hectáreas invadidas por la minería ilegal, estas zonas aún son vulnerables y necesitan ser constantemente vigiladas.

El jefe de la Reserva Nacional Tambopata, Vladimir Ramírez, destacó los primeros logros obtenidos por el monitoreo con drones dentro del área protegida.

“Hace más de dos meses, por ejemplo, habíamos despejado las zonas desde el puesto de control ‘Azul’. Pero cuando se hizo el primer vuelo de dron se observó que había minería que operaba con motores pequeños. Gracias al monitoreo los identificamos y fueron expulsados. Tiene una importancia vital (el uso de drones), pero recién estamos aprendiendo a maniobrarlos”, detalló Ramírez.

Para Víctor Zambrano, el uso de drones permitirá desarrollar una verdadera estrategia de lucha contra la minería ilegal. Foto: Otto Alegre.

El taller se centró en los componentes básicos del dron (software y hardware), modos de uso de vuelo, seguridad y cuestiones teóricas durante el primer día. Durante los siguiente tres días realizaron clases prácticas de vuelo: despegue, aterrizaje, elevación, desplazamiento el propio eje y movimientos de cámara.

Para el presidente del Comité de Gestión de la RN Tambopata, Víctor Zambrano, el monitoreo con drones permitirá desarrollar una verdadera estrategia integral de lucha contra las amenazas del área protegida, además de resguardar la seguridad de las personas que vigilan por tierra.

“Es una forma fidedigna de medir los impactos que tenemos en este momento. Nos permite observar el desastre que viene sucediendo. Desde lo alto, que es muy distinto a monitorear desde la superficie, donde hay zonas inaccesibles. Esto nos permitirá definir verdaderas estrategias, no solo especulación”, afirma Zambrano.

Vladimir Ramírez remarcó la necesidad de seguir capacitándose en el manejo de drones, y hacer más continuo el monitoreo aéreo de la Reserva. Dado lo inaccesible de algunas zonas del bosque, la vigilancia por medio de estos aparatos permite mejorar los operativos contra minería ilegal.

“La Reserva está liberada de mineros ilegales pero siempre vuelven. Uno o dos se arriesgan, con tal de ganar una semana de trabajo se meten adentro del bosque. Hay lugares en los que no podemos entrar. Para eso justamente necesitamos saber, por ejemplo, a qué altura podemos llevarlo (el dron) para que pueda identificar desbosque por minería”, subrayó Ramírez.

A su vez, Víctor Zambrano hizo énfasis en las áreas críticas de la zona de amortiguamiento de la Reserva que deberían ser monitoreadas con mayor frecuencia.

Existen lugar de difícil acceso dentro de la Reserva Nacional Tambopata, donde el uso de drones facilita el monitoreo del área protegida. Foto: Otto Alegre.

“En La Pampa, entre los kilómetros 107 y 117 de la carretera hasta el borde mismo de la Reserva. Esos caminos son la puerta de entrada de mineros al área protegida, es donde debemos vigilar permanentemente. Es en estas zonas donde el Estado no aparece ni por asomo”, aseguró Zambrano.

Un próximo taller más especializado para el manejo de drones se dictará a inicios de abril, donde se espera contar con mayor participación de guardaparques y especialistas del Sernanp, así como miembros de la sociedad civil a través del Comité de Gestión de la Reserva.

Según fuentes oficiales, hasta setiembre del año pasado se estimaba que unos cinco mil sujetos entre mineros, comerciantes, taxistas y proveedores de insumos estaban instalados en “La Pampa” (zona de amortiguamiento) y la Reserva.

La Reserva Nacional Tambopata

La cuenca del río Tambopata presenta uno de los índices más altos de biodiversidad del mundo. Entre sus ecosistemas más comunes se encuentran los aguajales, pantanos, pacales y los bosques ribereños.

De acuerdo con el Sernanp, más de 40 especies de aves migratorias transcontinentales utilizan los hábitats acuáticos de la Reserva. En total, en esta área se ha registrado 632 especies de aves, 1200 de mariposas, más de un centenar de especies de anfibios y reptiles, 180 de peces y 169 de mamíferos.

En setiembre del año pasado la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA) entregó estos drones a la jefatura de la Reserva y al Comité de Gestión. Dicha donación y los talleres se desarrollaran en el marco del proyecto “Fortaleciendo la gobernanza ambiental en Madre de Dios” que la SPDA viene desarrollando con la fundación Gordon & Betty Moore.