Luego de que el expresidente de la Conferencia Episcopal Peruana (CEP), Miguel Cabrejos Vidarte, aceptara ser el mediador en el diálogo entre el gobierno central, regional y la empresa Yanacocha para solucionar el conflicto social debido al proyecto Conga, las tres partes involucradas han aceptado dicha propuesta.

Por parte de las autoridades de Cajamarca, pidieron también la participación del sacerdote Gastón Garatea. Asimismo, solicitaron el levantamiento del estado de emergencia que rige en las provincias de Cajamarca, Celendín y Hualgayoc, y el retiro de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional.

Las autoridades cajamarquinas «solicitamos al Gobierno Central la suspensión de las actividades de la zona del proyecto minero Conga, para evitar mayor conflictividad».

Por parte de la Yanacocha, la empresa saludó dicha designación como facilitador del diálogo que «buscará alcanzar la paz y armonía que Cajamarca y el país necesitan en estos momentos».

En una nota de prensa, Carlos Santa Cruz, vicepresidente de Newmont para Sudamérica, manifestó que “Yanacocha mantiene inalterable su compromiso con Cajamarca y reitera su total disponibilidad al diálogo que busca la unión entre todos».

Expresó que el diálogo es el único camino para llegar a entendimientos, «y confiamos en que monseñor Cabrejos llevará adelante esta tarea con la ponderación y la ecuanimidad que la situación requiere. Estamos dispuestos a colaborar en lo que podamos”, finalizó.

Horas antes, el presidente Ollanta Humala afirmó que la posición del Gobierno ante el conflicto continúa siendo la del diálogo, pero sostuvo que el Ejecutivo no puede ingresar en espacios donde “simplemente quieren que se escuche la posición de uno, cuando ya se conoce la posición recalcitrante de ciertos sectores, que ahora se oponen al agua”.