• Los estudiantes del nivel secundaria aprendieron sobre la importancia de conservar el ecosistema en el Bosque de Chepita. El taller fue dictado en la comunidad de Cochabamba, en Áncash.

 

El último lunes 14 de octubre, en el distrito de Cochabamba (provincia de Huaraz, Áncash), 50 escolares de la Institución Educativa 86061 fueron concientizados sobre la importancia de conservar el ecosistema en el Bosque de Chepita, un área de aproximadamente 1134 hectáreas donde habitan diversas especies de animales como venados, zorros andinos y pumas. Además, se ha comprobado que este ecosistema alberga valiosas plantas medicinales.

El taller fue dictado en el mismo Bosque de Chepita por los especialistas de la Administración Técnica Forestal y de Fauna Silvestre (ATFFS) de Áncash, quienes expusieron principalmente sobre las propiedades del Bosque de Chepita, la importancia de conservar su flora y fauna silvestre, y medidas para prevenir los incendios forestales.

Hugo Carillo Vargas, Administrador Técnico Forestal y de Fauna Silvestre de Áncash, mencionó que, años anteriores, este bosque tenía una mayor extensión, por lo que es importante empezar a conservarlo.

“Este bosque representa un ecosistema muy especial, sobre todo para la región de la sierra, en la parte occidental de nuestro litoral. Es un bosque de neblina y también formado por lluvia. El bosque tenía más amplitud de lo que estamos viendo ahora; sin embargo, estamos a tiempo de que pueda ser reservado. Por tanto, estamos en pleno proceso para categorizar este bosque en un nivel que va a mejorar su conservación y restauración”, explicó. 

Además de los estudiantes de secundaria, los docentes también participaron de este taller. Precisamente, la profesora Maricarmen Andrade destacó la importancia de que este tipo de actividades:

“Me parece bueno que los alumnos conozcan parte de su comunidad para que puedan cuidarlo. […] El hecho de haber venido aquí (al Bosque de Chepita), conocer un poco más, les ayudará bastante, y aprenderán qué hacer y qué no hacer”. 

Este tipo de actividades refuerzan el compromiso de diversas instituciones con la protección del Bosque de Chepita, un ecosistema que necesita del esfuerzo conjunto de comunidades, autoridades y nuevas generaciones para garantizar su conservación y sostenibilidad en el tiempo. 

Así lo destaca Angélica Gómez, asistente legal de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA): 

“Actividades como esta son importantes y gratificantes porque demuestran lo que se puede lograr mediante un trabajo articulado. Esperamos que el compromiso se mantenga y que muchos más actores se involucren progresivamente en diferentes actividades, a fin de apuntar a una gestión participativa y sostenible que brinde más beneficios a la comunidad”. 

Cabe mencionar que esta actividad fue desarrollada de manera conjunta por la Municipalidad Distrital de Cochabamba, la Administración Técnica Forestal y de Fauna Silvestre de Áncash y el Gobierno Regional de Áncash, con el apoyo de la SPDA. 

Bosque de Chepita: rumbo a la lista de ecosistemas frágiles del Perú 

El Bosque de Chepita está ubicado en el distrito de Cochabamba y, actualmente, se encuentra en proceso de ser incluido en la Lista Sectorial de ecosistemas frágiles. Es preciso indicar que esta denominación la reciben los espacios que albergan una gran diversidad, pero poseen una baja capacidad de retornar a sus condiciones originales frente algún cambio causado por el hombre o la propia naturaleza. 

Un reportaje de Salud con Lupa destaca que tres especies de plantas medicinales que crecen en sus laderas están amenazadas: la tara (Caesalpinea spinosa), la tasta (Scallonia myrtilloides) y el chachacomo (Scallonia resinosa).  

Asimismo, el Bosque de Chepita es también el hábitat de un ave endémica de los andes peruanos: el tijeral coronado (Leptasthenura pileata), también denominado coludito coronado o tijeral de corona castaña.