• El influencer mexicano se pronunció después de generar controversia al visitar y luego denunciar a una familia que poseía animales silvestres en la selva peruana.

• El video publicado en Youtube llevó al decomiso de especies silvestres que eran tratadas como mascotas, además de partes de animales destinados para la venta. 

Luisito Comunica, youtuber mexicano, compartió un video donde se muestran personas de las comunidades de la Amazonía que tenían animales silvestres como mascotas, además de partes de especies de fauna utilizadas como adornos o disponibles para la venta.

El creador de contenidos hizo la denuncia con organizaciones locales dedicadas a la protección de fauna. Posteriormente, se reportó el caso a través del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) que llevó al decomiso de estos animales y productos por parte de la Gerencia Regional de Desarrollo Forestal de Fauna Silvestre de Loreto. 

“Se comenta que yo fui a la policía; yo nunca fui a la policía, yo fui a organizaciones de cuidado de animales”, escribió el influencer tras ser criticado en redes sociales. Asimismo, añadió que le impactó «muchísimo ver a tantos animales viviendo en esas condiciones”.

¿Animales silvestres como mascotas?

Roberto Vieto, asesor global de bienestar animal de World Animal Protection (WAP), comentó para Actualidad Ambiental que “aunque estos animales pueden ser amados por sus tutores, las especies silvestres no son animales domésticos ya que no pueden expresar sus comportamientos naturales, sufren mucho estrés, y sus cuidados son inadecuados. Ya sean capturados en la naturaleza o criados en cautiverio, estos son animales silvestres, no juguetes ni accesorios fotográficos”.

El especialista destacó la preocupación que le generó el caso de la cría de otorongo y lo calificó como un acto “inaceptable” desde un punto de vista de bienestar animal y seguridad para las personas.

Por su parte, Luis Zari, especialista Legal de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), destacó tras el caso que “la situación en la Amazonía peruana es especialmente grave debido al nivel de biodiversidad que alberga y a las especies que se extraen para su venta ilegal. Se sabe que en la triple frontera de Colombia, Perú y Brasil se vende fauna silvestre como mascota y como carne de monte. Asimismo, de acuerdo con la Estrategia Nacional para Reducir el Tráfico Ilegal de Fauna Silvestre en el Perú, el mercado de Belén en Iquitos concentra gran parte del comercio ilegal de la zona nororiental del país”. 

El abogado recordó que la tenencia, comercio o transporte ilegal de fauna silvestre es un delito que se castiga hasta con cinco años de cárcel y que este caso en particular puede ser visto como una oportunidad para brindar mayor información y para “tener un enfoque preventivo que no solo criminalice a las personas que realizan esta actividad, sino que se pueda pensar en alternativas sostenibles para ello”.

Sufrimiento en nombre del turismo 

WAP ha expuesto las actividades de comercio de vida silvestre y la cruel situación que viven los animales en la Amazonía peruana y brasileña en nombre del turismo. El reporte, “Un acercamiento a la crueldad” revela los efectos perjudiciales de la creciente popularidad de las selfies con animales silvestres.

“Resulta imprescindible realizar esfuerzos de concientización para que los turistas no participen de actividades donde los animales han sido capturados de la naturaleza y que las personas de las comunidades comprendan los impactos negativos para el bienestar y conservación de las especies cuando son extraídos de su hábitat”, dijo Roberto Vieto.

En este enlace podrás encontrar  6 consejos para ser responsable con la vida silvestre al viajar , pero recuerda priorizar actividades o experiencias que no involucren animales silvestres en cautiverio. 

Dato:

• Cuando empezó la pandemia por COVID19, WAP entró en acción con una carta abierta al G20 para pedir el fin del comercio mundial de vida silvestre. Ese año quedó claro que la forma en que tratamos a los animales silvestres tiene que cambiar para ayudar a evitar que otra enfermedad zoonótica afecte al planeta.