Piura: Ministerio de Cultura declara los veleros artesanales de Cabo Blanco y El Ñuro como Patrimonio Cultural

Foto: Direpro Piura, 2017.

El Ministerio de Cultura emitió la Declaratoria de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación a “los conocimientos, saberes y prácticas asociadas a la navegación y pesca tradicional con veleros artesanales en las caletas de Cabo Blanco y El Ñuro en la provincia de Talara, departamento de Piura, por tratarse de recursos culturales, sociales y económicos de vital importancia para el estilo de vida y la identidad de las familias de pescadores de estas localidades, las que han sabido adaptarlas a lo largo de un cambiante panorama histórico y diversas condiciones ambientales, dándoles sostenibilidad y continuidad a lo largo del tiempo”.

Este reconocimiento responde a una iniciativa por poner en valor el velero de pesca artesanal de la organización Inkaterra, promotora de turismo y conservación, quien gestionó ante el Ministerio de Cultura la Declaratoria de los veleros artesanales de Cabo Blanco y El Ñuro como Patrimonio Cultural Inmaterial.

Luego de elaborar el sustento técnico e histórico, y de promover el expediente con el apoyo de la Organización No Gubernamental H2Oceanos, finalmente el Ministerio de Cultura ha emitido la Declaratoria de Patrimonio Cultural que será entregada a los pescadores de Cabo Blanco el 4 de agosto, cuando se celebran 103 años de la fundación de la caleta de Cabo Blanco, en una ceremonia con la presencia de autoridades nacionales, regionales y locales.

El Estado Peruano, a través del Ministerio de Cultura, reconoce al pescador artesanal tradicional y sus saberes ancestrales y, en nombre de la nación, rescata el valor de estas prácticas, valorando a estas comunidades que día a día y de generación en generación vienen conservando esta tradición de la navegación y la pesca exclusivamente propulsados con el viento.

Según indicó el presidente del gremio de pescadores artesanales de Cabo Blanco, Carlos Chapilliquén, este es un reconocimiento muy esperado e importante para la verdadera pesca artesanal. El dirigente indicó que este logro ayudará a promover esta pesquería selectiva que pasa de generación en generación.

Asimismo, señaló que no solo serán beneficiados los pescadores artesanales de Cabo Blanco sino también los de caletas vecinas. Chapilliquén espera que esta parte del litoral sea pronto declarada como área natural protegida y cuente con el apoyo del Estado peruano.

Una tradición ancestral

La pesca en embarcaciones a vela impulsadas por el viento es una tradición ancestral de navegación, posible gracias al conocimiento de sus pobladores (comerciantes y pescadores) que utilizaron antiguamente las balsas de troncos, algunas de cuyas versiones se conservan y utilizan hasta hoy.

Esta tradición en el empleo del viento y las velas ha evolucionado, pero se ha mantenido en estas caletas con el empleo de los veleros de pesca artesanal actuales, símbolo de identidad de estos pescadores, descendientes de los antiguos pueblos prehispánicos de la región.

Para rescatar el valor de estas técnicas y tradiciones, un grupo de entusiastas, pescadores, empresarios y autoridades locales, lanzaron el 2016 una iniciativa para celebrar el centenario de la caleta de Cabo Blanco. Siguiendo la tradición y sus costumbres, se organizó la Gran Regata del Siglo con ocasión del día del pescador el 29 de junio de ese año. Este evento fue un éxito y se volvió a organizar el 2017 y 2018. Hoy constituye una actividad importante de las celebraciones de Cabo Blanco en la fiesta de San Pedro y San Pablo de cada año.

Los objetivos de la Gran Regata del Siglo fueron poner en valor el velero de pesca artesanal peruano, promover la pesca selectiva y sostenible que realizan estos pescadores y promover la creación de un área marina protegida que sirva para asegurar esta pesca tradicional y el desarrollo de un turismo sostenible que beneficie a estas poblaciones costeras.