Cinco lugares para conocer la naturaleza, cultura e historia del Paisaje Purús – Manu
La naturaleza y culturas del Purús – Manu tienen mucho por ofrecer para quienes disfrutan del aire libre y la aventura.
La Amazonía sureste del Perú es un lugar de extensa diversidad biológica y cultural, además destaca por sus maravillosos paisajes y porque aún alberga zonas inexploradas por el hombre. Por estas características, esta parte del país tiene un gran potencial turístico que beneficiaría económicamente sobre todos a las comunidades nativas que viven alrededor.
Si bien algunas zonas son más conocidas que otras, como el Parque Nacional del Manu o la Reserva Nacional Tambopata, en este sector también existen otras áreas protegidas como el Parque Nacional Alto Purús, o las reservas comunales Amarakaeri y Purús, lugares que atesoran sitios dispuestos a recibir a los viajeros nacionales y extranjeros.
Ante la pandemia del COVID-19, diversas iniciativas que ofrecían servicios turísticos alrededor tuvieron que detener sus actividades; sin embargo, hoy se están renovando las visitas. A continuación, presentamos algunas opciones que se pueden hallar durante todo el año:
1. Aguas Calientes de Shintuya
Para una experiencia completamente distinta en la Amazonía, las Aguas Calientes de Shintuya son una buena alternativa. Estas aguas medicinales están ubicadas en la parte alta del río Madre de Dios, a 15 minutos en bote desde la comunidad nativa de Shintuya.
La poza de agua caliente que es el principal atractivo.
El lugar cuenta con instalaciones para acampar, cocinar y también existe un albergue para quienes deseen dormir en medio de la naturaleza y desconectarse del ruido de las ciudades.
El sitio también posee senderos para caminar por el bosque y recorrer las quebradas de agua fría. Se pueden hallar pozas de todas las profundidades, una pequeña catarata y toboganes de piedra para deslizarse.
Se puede llegar por vía terrestre, desde la ciudad de Cusco hasta Salvación (6 a 8 horas), y desde ahí hasta Shintuya (2 a 3 horas).
En Shintuya también se aprecia la cultura ancestral de los indígenas harakbut. Ahí podemos encontrar artesanos, cazadores y ancianos sabios que mantienen viva la tradición de estos indígenas que vivían en aislamiento voluntario hasta la década de 1950.
El paisaje rodeado de montañas verdes de Queros Wachiperi es espectacular.
2. Turismo comunitario en Queros Wachiperi
Un paisaje espectacular, buena comida y cultura se puede encontrar en la comunidad nativa Queros Wachiperi, de la etnia harakbut.
Queros es una pequeña comunidad nativa de la provincia de Paucartambo (Cusco) que tiene un emprendimiento turístico comunal bien pensado e implementado que incluye un pequeño y pintoresco albergue, así como comida tradicional con un toque moderno.
Entre las principales actividades que se pueden realizar en el lugar están: caminar por el sendero interpretativo de plantas medicinales, visitar un pequeño aguajal, comer pescado fresco y libre de mercurio de sus piscigranjas, visitar los petroglifos de Hinkiori y bañarse en el río Queros de aguas cristalinas.
Para llegar a la comunidad hay que hacer la misma ruta que para Shintuya, y tomar un desvío saliendo de Salvación.
3. Río La Novia y cocha Pernambuco: motivos para conocer el Purús
Visitar el Parque Nacional Purús es toda una experiencia, empezando porque la única forma de llegar es por aire y la vista en todo momento es espectacular. Si bien años atrás esta zona no tenía vuelos regulares hasta Puerto Esperanza (capital de la provincia de Purús), ahora se pueden hallar vuelos diarios y subsidiados desde Pucallpa. La zona también ya cuenta con energía eléctrica todo el día gracias a un nueva y moderna planta solar. Aquí también se puede encontrar hospedaje, productos brasileños y la oportunidad de conocer y convivir con siete pueblos indígenas.
El río La Novia
De Puerto Esperanza a la desembocadura del río La Novia son mas o menos 20 minutos en peque peque. Desde ahí comienza un recorrido muy agradable donde la naturaleza se luce con sus especies de flora y fauna, especialmente aves que pasan en bandadas.
En este trayecto se puede visitar diversas comunidades indígenas de diferentes etnias. En ellas podremos encontrar frutos como el maní, coco y la sandía, así como comprar las diversas artesanías que fabrican usando productos naturales.
Izquierda: río La Novia. Derecha: cocha Pernambuco.
La cocha Pernambuco
A diez minutos de ingresar al río La Novia está ubicada la comunidad nativa San José, y dentro de esta se encuentra la cocha Pernambuco, un espejo de agua donde se desarrollan actividades como la crianza de paiches.
Los visitantes también pueden recorrer esta cocha usando canoas y disfrutar del paisaje adornado por árboles centenarios y aves emblemáticas como el shansho.
En la comunidad San José también se pueden comprar artesanías del pueblo huni kuin, conocidos por su trabajo con mostacillas y tejidos de algodón.
Vista aérea de la comunidad nativa San Martín de la etnia huni kuin.
4. Comunidades nativas Nuevo San Martín y Nueva Luz
En la zona de amortiguamiento de la Reserva Comunal Purús se encuentran estas dos comunidades huni kuin que resaltan porque aún mantienen sus tradiciones, realizan actividades productivas sostenibles y son aptas para el desarrollo del turismo vivencial.
En la comunidad nativa Nueva San Martín, ubicada en el margen del río Purús (dos horas de navegación desde Puerto Esperanza), se pueden apreciar actividades como la cosecha de huasaí y el tejido ancestral con algodón que crece en el mismo sitio. Asimismo, se puede recorrer por los diversos senderos selva adentro.
Por otro lado, la comunidad nativa Nueva Luz (cuatro horas en bote desde Nueva Esperanza) resalta porque desde aquí se tiene una hermosa vista del río Curanja, y además porque aquí se desarrollan actividades como el manejo de las tortugas taricaya y el teparo.
En ambas comunidades, además, se pueden hallar diversas opciones para comprar artesanías hechas con insumos del bosque.
Cocha Cashu, ubicada dentro del Parque Nacional del Manu.
5. Solo para investigadores: Estación Biológica Cocha Cashu
Se ubica en el corazón del Parque Nacional del Manu. Es uno de los mejores lugares del país donde se puede hallar fauna sin tener que recorrer grandes distancias. Aquí las construcciones son mínimas para no perturbar el ambiente: no existen habitaciones, pero existen zonas donde los visitantes pueden instalar sus carpas.
En Cocha Cashu se han producido unas 800 investigaciones con temas variados. Las especies emblemas del lugar son los lobos de río, el caimán, el mono aullador y el maquisapa. También existen diversos senderos bien señalizados para los visitantes.
La estación biológica, administrada por San Diego Zoo Global, por ahora solo está abierta a investigadores e invitados que realizan actividades especiales en el área.